Las críticas de David Pérez «Davicine»:
Hellraiser (2022)
Una joven que lucha contra la adicción entra en contacto con una antigua caja rompecabezas, sin saber que su finalidad es convocar a los cenobitas, un grupo de sádicos seres sobrenaturales de otra dimensión, en esta terrorífica versión del clásico de terror. Dirigida por David Bruckner, Hellraiser está protagonizada por Odessa A’Zion, Jamie Clayton, Adam Faison, Jamie Clayton, Goran Visnjic, Selina Lo, Drew Starkey y Hiam Abbass. La película se estrena en Prime Video y Filmin el 6 de julio de 2023.
Una vuelta a los orígenes
Desde hacía muchos años se oían de vez en cuando rumores de un posible reinicio de la saga Hellraiser, una saga que había quedado relegada al mercado de formato doméstico, aunque en 2013 fue el propio creador del universo cenobita, Clive Barker, quien declaró que tenía la intención de volver a la franquicia… aunque se quedó en eso, en una intención.
Pues bien, finalmente no cayó en saco roto este proyecto y ha visto la luz el esperado reinicio de la legendaria película de terror Hellraiser, y para tranquilidad de los fans está al frente de la dirección David Bruckner (El Ritual, Southbound).
La franquicia comenzó en 1987 con la película basada en la novela de Barker, «The Hellbound Heart», y cuenta la historia de un hombre que abrió una puerta a otra dimensión que resultó en la destrucción de su cuerpo por los cenobitas, criaturas del infierno que otorgan placeres sadomasoquistas a aquellos que los invocan con el uso de una misteriosa caja rompecabezas. Los cenobitas son liderados por Pinhead, el rostro de la franquicia que actuaría como el principal antagonista en las nueve secuelas.
Director acertado para un reinicio más que acertado
La última película de esta franquicia hasta la fecha se estrenó en 2018, Hellraiser: Judgement, pero no ha sido hasta este reinicio que hemos podido ver de nuevo algo a la altura de la idea original con la que decidieron hacernos pasar miedo.
La elección de Bruckner para ocupar la silla de dirección ha sido todo un acierto, un director que despuntó en 2007 con la película de terror de ciencia ficción La señal – The Signal, por la que fue nominado para un premio Independent Spirit, y contribuyó a la primera entrega de la trilogía de horror antológica, V/H/S, y a la aclamada antología Southbound, así como el thriller sobrenatural El Ritual. Su anterior película, The Night House, incluso se estrenó en Sundance.
Bruckner quiso dejar claro desde el inicio que tanto él como los guionistas, Ben Collins y Luke Piotrowski, querían en todo momento una mujer al frente del reparto, pues su objetivo era tener una protagonista femenina para interpretar a Pinhead con cambio de género en esta reinvención del antagonista clásico, y por suerte no queda como un mero reflejo de los tiempos en los que muchas películas cambian el género de sus protagonistas, funcionando muy bien y de forma natural este Cenobita que llega para aterrorizar nuestros sueños.
Clive Barker no renuncia a este reinicio
No son pocas las veces que el creador original de una franquicia o idea acaba renunciando a algunas de sus secuelas, y era de esperar que tras tantas y tantas películas de Hellraiser que veíamos como bajaban de calidad, Barker dijera «basta».
Para esto no hubo que esperar a Hellraiser: Judgement en 2018, sino que en 2011 se estrenó Hellraiser: Revelaciones, una entrega que casi había perdido el sentido completamente, película de muy bajo presupuesto que se rodó en 3 semanas y que desató la ira de Barker desentendiéndose del proyecto y declarando que no había tenido nada que ver con la producción. Claramente, esta película se hizo no por recaudar sino por no perder Dimension Films los derechos de la franquicia y poder poner en marcha un proyecto más ambicioso en el futuro.
La nueva versión de Hellraiser, producida por Spyglass Media Group, mantiene el título original sin numeración ni subtítulos, pues llega como un claro remake de la original, aunque no está basado en el libro ni nos cuenta una historia similar a la original, pero mantiene todo su espíritu. Tras 10 películas de la misma franquicia, se realiza un borrón y cuenta nueva con la idea de contar la historia con una intensidad fresca, homenajeando la estructura y el diseño de la primera encarnación, pero creando una película más oscura y enriquecida, como quiso Barker desde hace 10 años.
Ampliando la mitología mientras se respeta el original
La presencia de lo cenobitas y su misión en la Tierra amplía la mitología mientras plantea una nueva forma de manejar a estos seres, y podríamos ver esta película tanto como un remake pero también como una secuela que nos permite continuar disfrutando el legado original aunque no sea canónica en el sentido estricto de la palabra y prefiera mostrarse como una obra independiente que intenta abrir nuevos caminos.
Pero aún siendo un reinicio, al estar el autor original implicado en la producción se ha optado por no saturarla de efectos digitales, sino respetando lo que Barker adora y empleó en la primera entrega, que es deleitarnos con efectos de maquillaje llevados al límite para la creación de los cenobitas, lo que no va en contra de ser todo un espectáculo visual ambicioso y adaptado a nuestros tiempos, siendo una pena que no podamos verla en pantalla grande.
El diseño de personajes es fiel a la idea original, donde tenemos músculos retorcidos sobre metal y capas de piel curtida con un exceso de «acupuntura», y el nuevo Pinhead finalmente es más andrógino que nunca, interpretado por una mujer trans, Jamie Clayton, lo que coincide con las descripciones del texto original de Barker, quien ha elogiado esta reinterpretación más fiel a lo que tuvo en mente de inicio. Algo que coincide con la idea principal es que la villana no es Pinhead, sino los hombres que necesitan sacrificar a otros para liberarse de los dones de los cenobitas.
Aceptando el dolor con tiempo
Si algo puede objetarse a esta nueva película es su tiempo de metraje, o al menos para aquellas personas que lleguen a Hellraiser por el mero reclamo de la sangre. Todas las anteriores entregas de la franqicia, incluida la original, no duraban más de 90 minutos, sabiendo perfectamente lo que querían vender y llevando al espectador a lo que quería ver con tan sólo diez minutos de introducción, adentrándose desde ese momento en el festival de sangre y casquería.
Curiosamente, Bruckner y sus coguionistas han preferido que esta película no sea tan sólo una película de terror repleta de sangre, sino también un drama con personajes con tiempo para desarrollar sus carencias emocionales y comprender mejor sus decisiones durante la acción. Quizás por ese motivo han dedicado un exceso de tiempo para mostrar todas las historias de fondo, retrasando el climax de la película que se alcanza con la presencia de los cenobitas. Pero si se desea ver una película completa y compleja con su correspondiente arco argumental y su pertinente dosis de sangre, si que Hellraiser logra la plena satisfacción con la decisión tomada por los guionistas, consiguiendo ser un interesante drama de personajes dentro de una película de terror.
Desde el momento en el que el drama da paso al terror, sin olvidarse de continuar desarrollando los problemas y carencias de los protagonistas, recordamos la película que estamos viendo. No se escatima en finales violentos para muchos de los personajes con los que habíamos empatizado, y los cenobitas equilibran el drama con el horror visceral que traen consigo, sin escatimar en el uso de cadenas y ganchos para hacer buen uso con sus víctimas.
En resumen, Hellraiser es un reinicio de la popular franquicia de terror, dirigido por todo un experto en el género como es David Bruckner y con el beneplácito del propio Clive Barker. Sin llegar al nivel de las dos primeras películas, que son por méritos propios películas de culto en toda regla, si que es un reinicio más que sólido que merece ser visto por fans de la original y del cine de terror en general.