Las críticas teatrales de Laura Zurita:
The Shit Show
Es domingo, 28 de Enero de 2020. Donna Rotunno, abogada de Harvey Weinstein, acude al estudio del Daily Times invitada por Megan Twohey, periodista que destapa el escándalo de los abusos sexuales del productor cinematográfico. El juicio de Nueva York está en pleno proceso. El resultado es impredecible. Cabe la posibilidad de que Weinstein no llegue a ser condenado.
Dramaturgia a partir de la polémica entrevista que Twohey realiza a Rotunno y fragmentos de la transcripción del juicio al ex magnate de Hollywood. Una ficción documental que nos permite viajar dentro de la mente de tres mujeres: la abogada que defiende a un hombre acusado de agresión sexual, la periodista que intenta entender los porqués y una de las denunciantes. ¿Hemos llegado a un acuerdo sobre el concepto de consentimiento? Una vez más, se vuelve a poner en tela de juicio a la víctima en lugar de al agresor. Es en este momento de duda, de analizar cuán “perfectas” son las víctimas, en el que se lleva a cabo la conversación entre Twohey y Rotunno. Momento previo a la sentencia. Una sentencia considerada ejemplar y que ayudó a transformar el sistema judicial en Estados Unidos. Un hito en el movimiento #MeToo.
The Shit Show está escrita y dirigida por Elisabet Altube e interpretada por Ariana Martínez y Mónica Miranda. La obra se representa durante el mes de octubre del 2024 en el Teatro Quique San Francisco.
Rabiosa actualidad, tanto años después
El juicio contra Harvey Weinstein tuvo una amplia repercusión mediática y ha dado lugar a libros y varias obras audiovisuales. Al descubierto (Maria Schrader, 2022, basada en el libro del mismo nombre) es la más conocida. The Shit Show tiene lugar durante y después del juicio a Harvey Weinstein, dos años después de los hechos recogidos en Al descubierto.
Los hechos que dieron lugar a las acusaciones y el juicio de Weinstein sirven de telón de fondo en The Shit Show, pero el foco está dirigido a la actuación de la abogada de Weinstein, Donna Rotunno, que ya había ganado fama por haberse especializado en defender a acusados de delitos sexuales y violencia de género. La abogada se caracteriza por usar interrogatorios durísimos, de tal manera que las que se ponen en entredicho son las víctimas y no los acusadores.
The Shit Show pone de manifiesto que Rotunno es una mujer muy inteligente y con un gran dominio de las palabras, y tanto su oratoria como su aspecto externo son pulidos y refinados. A pesar de que superficialmente la abogada defiende principios democráticos y respeto por acusadores y acusados, si se examina con cuidado su discurso, en él se esconden conceptos que tanto hemos oído en casos de violaciones como «la víctima se lo ha buscado» o «la acusación no es creíble porque la persona es promiscua». Eso sí, se esconden bien para que todo parezca moderno y democrático. Rotunno un personaje complejo y en cierto sentido fascinante, y muestra que todo este proceso del #MeToo no se trata de un enfrentamiento de mujeres contra hombres, sino entre dos maneras de ver las relaciones entre las personas, y que la mentalidad depredadora se da en personas independientemente de su género.
La obra reconstruye en buena parte el juicio contra el productor, tomando literalmente textos originales y declaraciones de los protagonistas. Esto funciona y refuerza el impacto de The Shit Show, dado que los hechos son tan duros e impactantes que no necesitan elaboración, por lo que el trabajo hecho para escribir la obra es resumir el larguísimo proceso para hacerlo más accesible. Las actrices están muy involucradas en la obra y creen en la importancia y la urgencia de su mensaje, y eso se evidencia en el grado de entrega con el que trabajan. Es un placer verlas dar vida a personajes tan distintos, y de una manera tan vívida y creíble.
La escenografía de The Shit Show es abstracta, con pocos elementos, algunos de los cuales son simbólicos, como un brillante vestido, que representa el mundo del espectáculo, o el andador que Weinstein usaba, marcando indefensión durante el juicio. Para complementar las actuaciones en la escena se usan adiciones audiovisuales, como grabaciones del juicio o fragmentos que se proyectan en la pared del fondo, para darnos el contexto del juicio y de ciertos elementos de evidencia. La escena aprovecha al máximo todos los recursos, y el impacto en el espectador es arrebatador y duradero.
En conclusión, The Shit Show bucea en el juicio de Harvey Weinstein, centrándose en la polémica defensa de Donna Rotunno. La obra desvela las estrategias de manipulación y desacreditación de las víctimas, mostrando cómo la mentalidad depredadora trasciende el género. The Shit Show tiene un montaje impactante con grandes actrices, que expone la cruda realidad del #MeToo y la importancia de cuestionar los discursos dominantes.