Las críticas de Daniel Farriol en el AMFF 2024:
The Rapture
(Le Ravissement)
The Rapture (Le Ravissement) es un drama francés inspirado en hechos reales que está escrito y dirigido por Iris Kaltenbäck. Cuenta la historia de una comadrona comprometida con su trabajo que se encuentra en medio de una ruptura sentimental. En ese momento, su mejor amiga se queda embarazada y le pide que controle su embarazo. Tras reencontrarse con un hombre con el que pasó la noche llevando en brazos al bebé de su amiga decide contarle que es el padre y embarcarse en un viaje al engaño del que será doloroso bajarse.
Está protagonizada por Hafsia Herzi (Visiting Hours, Borgo), Alexis Manenti (Los indeseables, Dalva), Nina Meurisse (L’histoire de Souleymane, Les Algues vertes), Younes Boucif, Radmila Karabatic, Dusko Badnjar, Ana Blagojevic y Grégoire Didelot. La película se presentó en la Semana de la Crítica del Festival de Cannes 2023 y también ha podido verse en la sección Roads de Atlàntida Film Fest 2024.
La soledad como tema central
The Rapture (Le Ravissement) es el debut en el largometraje de la joven cineasta francesa Iris Kaltenbäck que realiza un retrato intenso sobre la soledad que compartimos en la sociedad contemporánea. Tomando como referencia el titular de una noticia que leyó acerca de una mujer que hizo creer a un hombre que el hijo de su mejor amiga era suyo, la directora traza una historia de ficción narrada bajo dos puntos de vista distintos que abordan el misterio que envuelve a una mujer de apariencia normal cometiendo un acto de locura en busca de una felicidad fingida.
La trama se centra en Lydia, una comadrona que pasa por una ruptura sentimental. Su mejor amiga se queda embarazada y ella le asiste durante el embarazo, sintiéndose parte de todo el proceso debido a lo unidas que se encuentran ambas. Sin embargo, ese es su único anclaje de integración social, no le conocemos otros amigos ni familiares, y su única relación esporádica más allá de lo laboral es la noche que pasa con un conductor de autobuses que rechaza mantener cualquier tipo de relación más duradera.
El tema de la soledad no se concentra únicamente en el personaje de Lydia y es algo que también adivinamos tras la mirada de Milo, el autobusero insomne, o a través de Salomé, esa madre primeriza con depresión posparto que confunde responsabilidades con dependencia hacia su marido. En una sociedad donde estamos más interconectados que nunca el aislamiento se vuelve todavía más nocivo, mientras la mayoría de personas aprenden a convivir con esa soledad interna, la protagonista de esta película la recibe como un sentimiento de rechazo que parece haberla perseguido toda la vida.
Influencias narrativas
Sin embargo, la directora juega al despiste y nunca desvela las verdaderas motivaciones de la protagonista para actuar de la manera en que lo hace o cuál es el verdadero origen de esa deriva mental que posiblemente esté relacionada con hechos de su infancia. No busca juicios ni explicaciones, simplemente propone al espectador un viaje en primera persona para conocerla mejor e identificarse con ella, al tiempo que la historia se nos narra mediante una voz en off que externaliza la acción, la del propio Milo.
Es un truco narrativo que funciona bastante bien aunque, en realidad, resulte algo tramposo, ya que en ese intento frustrado de comprender la situación el autobusero nos narra directamente algunos hechos acontecidos en los que nunca estuvo presente. Según cuenta la propia realizadora en diversas entrevistas, las mayores influencias cinematográficas de The Rapture (Le Ravissement) son el cine norteamericano de los años 70 y el cine asiático de principios de siglo con la sugestiva Millenium Mambo (Hou Hsiao-Hsien, 2001) a la cabeza.
No es de extrañar que el universo trágico y romántico del director taiwanés haya tenido impacto en el imaginario como directora de Kaltenbäck, el director de El maestro de marionetas (1993) es un fiel seguidor tanto de Yasujirō Ozu como de los directores franceses Albert Lamorisse, Jean-Luc Godard o François Truffaut. Por eso se entiende que en The Rapture (Le Ravissement) la voz en off, la textura granulada de la imagen y ese realismo alejado conscientemente del naturalismo actual entroncan a la perfección con mecanismos narrativos propios de la nouvelle vague francesa.
El hogar ilusorio
The Rapture (Le Ravissement) es un filme doloroso y amargo que también reflexiona sobre la maternidad o la infelicidad social (Lydia escoge como nombre para la niña el de Esmée que significa «la que es amada»). Los personajes parecen arrollados por las circunstancias de la vida que les obligan a seguir caminos que no desean, la locura sobrevenida de Lydia precisamente es una forma de rebelarse contra eso aunque sea algo efímero y delictivo, ella misma lo sabe y es quien decide ponerle fin.
La bola de nieve en que se transforma la mentira inicial de la protagonista toma un rumbo muy parecido al de La profesora de parvulario (Nadav Lapid, 2014), donde también se nos hablaba de la necesidad de trascender en un mundo gris. Ambas películas comparten un final desolador en una habitación de hotel, otro símbolo de la soledad del viajero en un hogar ilusorio. Sin duda, The Rapture (Le Ravissement) es una ópera prima prometedora de una directora a tener en cuenta en el futuro.
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The Rapture (Le Ravissement)
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