Las críticas de Óscar M.:
Ninja turtles: Caos mutante
Después de pasar años apartados del mundo humano, los hermanos Tortuga se proponen ganarse el corazón de los habitantes de Nueva York y que les acepten como quinceañeros normales, llevando a cabo actos heroicos. Su nueva amiga April O’Neil les ayuda a enfrentarse a un misterioso sindicato del crimen, pero pronto se ven superados ante el ataque de un ejército de mutantes que se abalanza sobre ellos.
La nueva película de animación Ninja turtles: Caos mutante cuenta con las voces de Micah Abbey, Shamon Brown Jr., Nicolas Cantu, Brady Noon, Ayo Edebiri y Jackie Chan, además cuenta con la participación de Rose Byrne, John Cena, Ice Cube, Natasia Demetriou, Giancarlo Esposito, Seth Rogen y Paul Rudd. Está dirigida por Jeff Rowe (Los Mitchell contra las máquinas), codirigida por Kyler Spears y tiene un guión escrito por Seth Rogen, Evan Goldberg, Jeff Rowe, Dan Hernandez y Benji Samit, basado en los personajes de Teenage Mutant Ninja Turtles creados por Peter Laird y Kevin Eastman. La película se estrena en cines en España el 25 de agosto de 2023 de la mano de Paramount Pictures.
Otra película, otro reinicio
En mitad de un panorama cinematográfico donde las secuelas de franquicias dominan la taquilla y hasta las mejores adaptaciones de superhéroes se han relegado a las plataformas de televisión, el enésimo (cuarto, siendo realistas) reinicio de la saga Tortugas ninja mutantes y adolescentes aparece como un soplo de aire fresco y animado para el público contra todo pronóstico agorero.
No es ningún secreto que las últimas dos entregas de la franquicia Ninja turtles dejaban mucho que desear. A pesar de la abultada recaudación de ese tercer intento de adaptación al cine, la primera parte se estrenó en 2014 protegida por la producción de Michael Bay y la secuela (de 2016 y titulada Ninja turtles: Fuera de las sombras) revolvían los mismos ingredientes sobre la misma e indigesta masa.
Dejando recomendaciones culinarias aparte, argumentalmente ambas producciones eran demasiado infantiloides, con las ínfulas de película de acción real con animación por ordenador, y dejaban un regusto extraño, a mitad de camino entre lo dulce y lo salado sin contentar ni a niños ni a adultos, como la pizza con chocolate.
Animación a tope
La mejor opción posible ha sido volver a los orígenes. Seth Rogen (a pesar de mi rechazo permanente) ha sido muy inteligente al devolver la historia al campo de la animación y recuperar la esencia que hacía interesante y apetecible de ver las aventuras del cuarteto de quelonios mutados.
Es innegable la fuerte influencia que tiene la animación que vemos en pantalla con la usada en Spider-man: Un nuevo universo (otra saga que ha sufrido los reinicios constantes): el abusivo uso de los colores, en los fondos de la ciudad y en el propio movimiento de los personajes recuerda a las dos entregas del héroe arácnido y a las tortugas les sienta tan bien esta nuevo enfoque que nos dejamos llevar cuando descubrimos que nos encontramos en un lugar seguro.
Otro brillante acierto del guion es volver a que las tortugas protagonistas sean realmente adolescentes, con sus dudas personales, sus miedos para encajar en la sociedad, sus omnipresentes teléfonos móviles, sus fantasías pajilleras y sus locuras propias de la edad. El personaje de April O’Neal también sale beneficiado de esta salpicadura adolescente, su frescura y la aproximación a la edad de las tortugas la convierte en más accesible para el público y encaja mejor en la historia, al igual que Splinter sea un adulto disfuncional.
Humor, referencias y mucha acción
Por las imágenes o los tráileres se puede pensar que Ninja turtles: Caos mutante es una película oscura o no recomendada para niños, pero es todo lo contrario, ya que el guion está lleno de bromas, detalles sobre la cultura popular y autorreferencias constantes que no hacen más que potenciar el punto de vista cómico que tiene la película (incluso hay referencias a las anteriores versiones que han llegado al cine, con guiños musicales o menciones directas).
La película está llena de escenas de acción, como no podía ser de otra manera, pero se toma su tiempo para introducir las peleas en la historia o desarrollar bien el enfoque desde el punto de vista de los personajes, consiguiendo una transición poco forzada desde la comedia y la introducción de la violencia es asumible por cualquier tipo de espectador.
Los cinco guionistas que han trabajado en la película (tres de los cuales son responsables de la historia en la que se basa) se han preocupado mucho para que esta adaptación cubra bien todos los aspectos que hacían interesante, divertida y entretenida a la serie de televisión original y ofrezcan una versión diferente (y menos adulta) de las vistas anteriormente.
Una gran selección musical y un ritmo incesante
El constante y bien calculado ritmo que tiene la adaptación consigue que apenas sobrepasemos una accesible hora y media de duración manteniendo la sonrisa en la boca y tarareando la excelente selección musical (el supervisor musical Gabe Hilfer merece una mención especial) o que disfrutemos de la descontrolada y enérgica composición de Trent Reznor y Atticus Ross, siendo piezas que encajan como un puzle dentro de una cadena de ADN alterado genéticamente.
Ninja turtles: Caos mutante en una verdadera aventura adolescente que funciona para cualquier tipo de público, desde los niños que se aproximen por primera vez a la historia con su completo desconocimiento hasta los adultos que crecimos viendo la serie de los años ochenta y que, por fin, podemos ver una película que mantiene la esencia y el espíritu mutante original con un punto de vista actualizado.