domingo, noviembre 3, 2024

Crítica de ‘Flash’: El regreso triunfal del Batman de 1989

Las críticas de David Pérez «Davicine»:
Flash

En Flash, los mundos chocan cuando Barry utiliza sus superpoderes para viajar en el tiempo y cambiar los acontecimientos del pasado. Barry intenta salvar a su familia, pero sin saberlo altera el futuro y queda atrapado en una realidad en la que el general Zod ha regresado y amenaza con la aniquilación, pero en la que no hay Superhéroes a los que recurrir. A menos que Barry pueda persuadir a un Batman muy diferente para que salga de su retiro y rescate a un kryptoniano encarcelado… aunque no sea el que está buscando. En última instancia, para salvar el mundo en el que se encuentra y regresar al futuro que conoce, la única esperanza de Barry es luchar por seguir vivo. Pero ¿este último sacrificio será suficiente para reiniciar el universo?

Producida por Barbara Muschietti (las películas de IT, Mamá) y Michael Disco (Proyecto Rampage, San Andrés), el guion es obra de Christina Hodson (Aves de presa (y la fantabulosa emancipación de Harley Quinn), Bumblebee), con una historia para el cine de John Francis Daley & Jonathan Goldstein (Dungeons & Dragons: Honor entre ladrones, Spider-Man: Homecoming) y Joby Harold (Transformers: El despertar de las bestias, Ejército de los muertos), basada en personajes de DC. Dirigida por Andy Muschietti, Flash está protagonizada por Ezra Miller, Ben Affleck, Sasha Calle, Michael Shannon, Ron Livingston, Maribel Verdú, Kiersey Clemons, Antje Traue y Michael Keaton. La película se estrena en cines el 16 de junio de 2023 de la mano de Warner Bros.

Flash, con Ezra Miller

El doble de acción al doble de velocidad

Si algo sabíamos con esta película, es que no habría tiempo para descansar. Barry Allen (Ezra Miller) necesitaría aún más velocidad para poder llevar a cabo todas las tereas que se le encomiendan, desde ayudar a la Liga de la Justicia como Flash hasta sacar adelante su trabajo cuando es Barry. Fiel reflejo de su vida es esta película en la que todo acontece al ritmo de la velocidad de la luz, donde no hay tregua entre acción y trama, pero hay espacio para la nostalgia que es lo que, sin duda alguna, eleva el nivel de esta película hasta poner la piel de gallina a los fans de DC que nos emocionamos al ver a Michael Keaton de nuevo como Batman, e incluso muchos cameos que es mejor no desvelar para evitar el efecto sorpresa en el cine.

Lo que no es spoiler es que la tarea tan complicada que tiene Barry en esta película requiere literalmente del doble de velocidad, de ahí que nada mejor que tener dos versiones de Barry, o más bien dos Flash de diferentes universos, dado que en Flash al fin tenemos el esperado multiverso que tanto se ha visto ya en la empresa de la competencia y aquí se ha hecho esperar, pero ha llegado por la puerta grande, aunque saldrá por la puerta de atrás, visto lo visto con el futuro que le depara a este universo cinematográfico que sufrirará un reinicio completo y muchos lo lamentamos tras ver esta última aventura hasta la fecha (sí, falta Aquaman 2, pero este hubiera sido el colofón perfecto).

Flash, con Ezra Miller

Hay que obviar el futuro de la franquicia

Esta película muchos la verán con reticencias por saber que tras ella poco más nos quedará de este universo que ha girado alrededor de lo creado por Zack Snyder, pero también por lo que ha costado que vea la luz tanto por los problemas con el reparto como con la silla de dirección. Lo que está claro es que muchas veces hay que entrar con la mente vacía en una película y dejarse llevar, y solo así, sin interferencias del exterior, se puede sacar lo mejor de una película como Flash, de la que puede que la taquilla no la acompañe pero la nostalgia y la emoción no faltarán a su cita con los superhéroes de DC, siendo una de las mejores películas de DC que se han visto en los últimos años.

Flash no mira adelante, sabe que tiene difícil captar seguidores entre los espectadores que quieran continuar viendo el legado que aquí se muestra, por lo que en todo momento mira al pasado, y lo hace de una forma como sólo DC puede lograr, combinando superhéroes de sobra conocidos por todos nosotros en una única película, muchos de los cuales jamás imaginamos podrían unirse en la misma historia.

El multiverso abre muchas puertas y, a diferencia de lo que ha hecho Marvel recientemente con la nueva aventura animada de Spider-Man que también hacía un uso masivo del multiverso, Flash  deja atrás el humor (aunque no falten chascarrillos) para sacar provecho de lo que ha hecho Snyder (y Nolan anteriormente) un sello de identidad de DC, que es la oscuridad que empapa el mundo, particularmente de Gotham, que tan presente está en esta aventura tanto con el Batman de Ben Affleck como con el de Michael Keaton, y alguna que otra sorpresa más para deleite de los amantes de este universo que vemos con malos ojos se reinicie por completo.

Michael Keaton como Batman en Flash, con Ezra Miller

Un Caballero Oscuro a la altura de las circunstancias

Desde el principio de este proyecto se hizo público que veríamos a Michael Keaton de nuevo como el Caballero Oscuro tras haber dado vida al personaje en las películas Batman (1989) y Batman Returns (1992). Podría pensarse que el factor nostalgia sería lo único que moviera esta película, pero Keaton es un actor tan imponente, y la sombra de Batman tan alargada, que no necesita de mucho para mejorar cualquier película de superhéroes y con su mítica  frase «Soy Batman» ya tiene ganado al espectador, más aún si todo viene acompañado de nuevo por el tema de Batman de Danny Elfman cuyos acordes nos erizan la piel.

Más de 30 años de espera han valido la pena solo con ver al actor enfundarse el mítico traje, pero también ayuda mucho ver de nuevo sus «Batcacharros» y su Batcueva. Los años pesan, pero Keaton sabe llevar el traje con tanto estilo, que aún sigue ofreciendo impecables escenas tanto como Bruce Wayne como en plena acción (aunque use dobles), demostrando que ser Batman es como montar en bicicleta, nunca se olvida. Gracias al actor tenemos algunas de las mejores escenas de Flash, llenando la pantalla con su sola presencia, y siendo por si solo el reclamo que esta película necesitaba, aunque está muy bien acompañado como para que la película merezca la pena su visionado (y más de una vez).

Flash, con Ezra Miller

Un multiverso plagado de giros y superhéroes

Más allá de la citada nostalgia, Flash combina también nuestros bonitos recuerdos de los héroes del pasado con una trepidante aventura de viajes en el tiempo y las consecuencias típicas del efecto mariposa cuando algo se cambia. Estos giros permiten hacer más distendida la historia, con destellos de humor para aligerar la carga de acción, que no es poca, y ofrecen al espectador suficientes opciones como para estar enganchado a la pantalla las casi dos horas y media de duración, no faltando efectos especiales de primer nivel en los combates y algo peculiares cuando nos adentramos en los cambios de universo.

El mayor elemento cómico de la película es el choque de personalidades entre las dos versiones de Barry que se encuentran en el pasado, y aunque es un recurso manido, se lleva a cabo de forma satisfactoria y entretenida gracias a una magnífica interpretación de Miller, que saca a relucir su talento actoral y lo lleva a cotas elevadas según avanza el metraje. Ezra Miller está en el ojo del huracán por otros motivos en la vida real, pero hay que valorar lo que logra en esta película, consiguiendo un Barry Allen carismático, cerrado en sí mismo pero con ganas de cambiar las cosas, a la vez que vemos un Flash ya más maduro y una versión casi infantil de alguien que recién adquiere unos poderes que jamás imaginó.

Junto a Miller y Keaton cabe destacar la sorpresa tan agradable que es Sasha Calle como Supergirl, en otro de los muchos giros de la película, y que nos apena que seguramente nunca disfrutemos de ella en una película en solitario o en compañía de su primo Superman (ojalá -por soñar- que interpretado por Henry Cavill). Mención especial también merece disfrutar de la presencia de Maribel Verdú como la madre de Allen.

En resumen, Flash es una película que sabe combinar la nostalgia con la acción, aderezada con un toque de humor y mucho corazón, donde difícilmente pondremos pegas a los personajes ni a la elección del reparto, y tan solo echaremos de menos a muchos de ellos en el reinicio que está por llegar.


¿Qué te ha parecido la película Flash?

Flash

7.2

Puntuación

7.2/10

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