Hace escasamente una hora la policía de Nueva York ha hallado muerto a Philip Seymour Hoffman en su apartamento de Manhattan por un asistente personal o por un guionista (según la fuente que se consulte).
La investigación policial ha comenzado y los médicos encargados de su autopsia revelarán pronto el motivo del fallecimiento, aunque en principio parece que ha sido una combinación de alcohol y drogas, puesto que habrían encontrado una aguja hipodérmica aún en su brazo.
Hoffman admitió en 2006 que abusaba de ciertas sustancias desde que se graduó en la escuela de arte dramático de Nueva York, pero ingresó en rehabilitación para superar su adicción. «Era todo (drogas y alcohol), sí. Me tomaba todo lo que caía en mis manos… Me gustaba todo», dijo en una entrevista por aquella época. El año pasado, Hoffman volvió a rehabilitación durante diez días.
El actor sólo tenía 46 años y se encontraba en un momento muy bueno de su carrera tras haber conseguido el Óscar en 2005 por su trabajo en la película Capote.
Para este año tenía pendiente de estreno God’s pocket, A most wanted man, Happyish que se encuentra en postproducción y ya había terminado Los juegos del hambre: Sinsajo – Parte 1, mientras que Sinsajo – Parte 2 se encuentra en pleno rodaje.
Fuente: WSJ
Una pérdida enorme. Uno de los grandes de su generación. Todavía estoy impactado.
Increíble. Es increíble cómo a gente que lo tiene todo le tiene que poder tanto la presión y el peso de la fama como para vivir enganchado a las drogas y terminar de esta forma, dejando toda una vida por delante, dejando a una familia y unos hijos destrozados.
Porque si no no me explico cómo vemos tantos casos como éste. En fin.
Cuando pasa eso a alguien famoso y con dinero, nos damos cuenta que es verdad que dinero o fama no son sinónimos de felicidad …
Es una pena, era un grandísimo actor