Las críticas de Laura Zurita en el VII Festival Cine por mujeres:
King of Kings: Chasing Edward Jones
Gángster para algunos, filántropo para otros, ¿quién fue realmente Edward Jones? En las décadas de 1930 y 1940, este descendiente de esclavos se convirtió en uno de los hombres más ricos de Estados Unidos gracias al negocio del Policy, un juego de números ilegal que finalmente se transformó en la lotería estatal moderna, que ahora juegan millones en todo el país.
Edward Jones, apodado el «Rey de Reyes», amasó una fortuna de 25 millones de dólares en el negocio del Policy y redistribuyó parte de ese dinero en su comunidad, dando un ejemplo y abriendo muchas puertas. Pero en estos tiempos de segregación, su éxito y su inquebrantable apoyo a la comunidad afroamericana eran un problema. En conflicto tanto con la mafia como con los federales, finalmente se vio obligado a llevar una vida como fugitivo.
Explorando el ascenso y la caída del más famoso «Rey del Policy» de todos los tiempos, la cineasta, nieta de Edward Jones, descubre una historia sin igual, mientras muestra las repercusiones duraderas de su historia no contada, tanto dentro de su familia como en el South Side de Chicago, donde alguna vez encarnó el sueño americano.
Amor, éxito, violencia, venganza, mafia, asesinato, traición, prisión, secuestro… La historia de Edward Jones tiene todos los mejores ingredientes de las películas de gángsters. ¡Añade segregación y obtendrás un cóctel muy explosivo!
King of Kings: Chasing Edward Jones está escrita y dirigida por Harriet Marin Jones. Es un documental en el que contamos, entre otros, con testimonios de Harriet Jones, Quincy Jones y Michel Fessler.
Tantas historias desaparecidas
King of Kings: Chasing Edward Jones comienza como un pequeño documental sobre la historia de familia, en el que la directora busca datos sobre la historia de su familia, porque sospecha que su abuelo era un hombre conocido en Chicago. Va descubriendo una historia que trasciende la vida de un hombre y su familia. Se nos narra la azarosa vida de una familia que, a pesar de estar compuesta de personas con una formación superior, y del padre de familia tener una posición sólida y respetada, tuvo que huir de su hogar en Alabama por amenazas del Ku Klux Klan.
La película cuenta como se trasladaron al norte de EEUU, junto con millones y millones de personas negras, huyendo de la opresión y el miedo, solo para encontrar una sociedad en la que la segregación era más discreta y de apariencia más civilizada, pero no menos real. A partir de entonces comienza la vida juvenil y adulta de los hermanos Jones, que podría haber dado lugar a varios guiones de cine negro, si la industria del momento se hubiera interesado por esta minoría en lugar de centrarse en los gánsteres blancos. Sin embargo, esta apasionante historia de hombres que se contaban entre los más poderosos de Chicago nunca alcanzó Hollywood, más interesado en mafias italianas, y tras unos pocos años fue borrada de la historia de la ciudad y del país.
La directora de King of Kings: Chasing Edward Jones, que ha crecido en Europa, se sorprende del grado en que la discriminación y el concepto de raza están imbricados en la vida en Estados Unidos, y ha sido capaz de dar a esta historia personal una dimensión universal, muy relevante en estos tiempos.
King of Kings: Chasing Edward Jones es soberbio en cuanto a realización, ritmo, una música absorbente y una estética soberbia. El documental mezcla imágenes de archivo, entrevistas con testigos de la época y animación que reconstruye escenas y momentos. Los colores son básicamente blanco, negro y rojo, el rojo de la sangre, que recuerda una de las leyes que definió la vida de muchas personas y que expresa los límites absurdos a los que puede llegar intentar guiar la legislación de un concepto tan vago y falto de rigor como el de raza. La ley de la gota, que afirmaba que, según el One-Drop Rule, era considerada negra aquella persona que llevara una «sola gota» de «sangre negra», esto es, un solo antepasado de ascendencia africana. Esa «gota» definió la vida de la familia Jones (y de millones de personas en sus mismas circunstancias) en EEUU, lo que en último término los hizo dispersarse por todo el mundo.
King of Kings: Chasing Edward Jones es una película soberbia y prueba que el cine de no ficción puede dar obras de arte con valor propio. Esperemos que el documental tenga distribución en España y podamos disfrutar de esta joya en pantalla grande.