Las críticas de Laura Zurita:
Puan
Marcelo (Marcelo Subiotto) ha dedicado su vida a la enseñanza de filosofía en la Universidad de Buenos Aires. Cuando su mentor muere inesperadamente, asume que heredará la titularidad de la cátedra vacante. No imagina que el carismático y seductor Rafael Sujarchuk (Leonardo Sbaraglia) volverá de Alemania para disputarle el puesto.
Puan es una película argentina escrita y dirigida por María Alché y Benjamín Naishtat e interpretada por Leonardo Sbaraglia, Lali Espósito, Julieta Zylberberg, Andrea Frigerio, Luis Ziembrowski, Marcelo Subiotto, Cristina Banegas, Alejandra Flechner, Camila Peralta y Héctor Bidondde. La película se estrena en España el 27 de marzo de 2024 de la mano de La Aventura.
Fondo amargo, tono de humor
La película Puan, dirigida por María Alché y Benjamín Naishtat, presenta una narrativa amarga envuelta en una capa de humor ligero, similar a la de las comedias del cine mudo. Bajo esta fachada humorística se esconde una profunda y dolorosa crítica a la realidad del profesorado, personificada en la figura de Marcelo, un docente de filosofía que se siente frustrado y considera su vida como un fracaso.
Marcelo, el protagonista de Puan, es un profesor competente que imparte clases magistrales, llenas de profundidad y amenidad, en las que expone la vigencia de los autores clásicos. Sin embargo, en el ámbito social se muestra como un individuo apocado y poco atractivo. A pesar de su entrega a la docencia, su salario es precario, lo que le obliga a realizar trabajos adicionales para subsistir. En contraposición a Marcelo encontramos a Rafael Sujarchuk, un antiguo compañero de estudios, carismático, atractivo y con gran desenvoltura social y manejo de las redes sociales. Rafael no deja de resaltar su experiencia laboral en el extranjero, creando un marcado contraste con la figura de Marcelo. La película ilustra con acierto la oposición entre ambos personajes, evidenciando cómo el trabajo meticuloso de Marcelo se ve eclipsado por el impacto mediático y la superficialidad de Rafael, incluso en el ámbito académico.
Puan también expone y critica la depauperación de la formación pública, representada por Marcelo y la universidad en la que trabaja, que se ve abocada a la escasez de recursos, especialmente en áreas «no productivas» como la filosofía. La película muestra escenas de protestas por parte de estudiantes y profesores que denuncian los recortes en la enseñanza pública, aunque este tema no se desarrolla en profundidad.
Guion con momentos memorables
Puan comienza con un tono humorístico, que en ocasiones roza lo ingenioso y en otras se torna simplista. En gran medida, la película ridiculiza sin piedad a Marcelo, lo que genera más irritación que diversión en el espectador. A medida que avanza la trama, el tono se vuelve más triste, desilusionado e incluso amargo, como se ha mencionado anteriormente.
El guion de Puan presenta momentos memorables, como las discusiones filosóficas que reivindican el valor y la fascinación por esta disciplina. Además, la película ofrece una descripción precisa y agotadora de la vida de Marcelo, quien lucha por mantener su dignidad en un mundo que lo ignora. Puan abre diversos frentes, algunos de ellos de gran interés, pero muchos quedan sin una resolución clara. El final, aunque evocador, no ofrece una verdadera conclusión a los dilemas planteados.
Las actuaciones en Puan son excelentes. Marcelo Subiotto ofrece una interpretación magistral, creando un personaje complejo, profundamente humano y entrañable a pesar de su torpeza. Leonardo Sbaraglia le da una excelente contraparte, aunque su personaje se limita en buena parte a una fachada al que le falta un desarrollo profundo.
Puan es una película que, bajo la apariencia de una comedia, esconde una profunda amargura y desilusión. Se trata de una defensa de la educación pública en un momento crucial de la historia argentina, y destaca por la brillante interpretación de Marcelo Subiotto.
¿Qué te ha parecido la película Puan?
Puan
