Las críticas de David Pérez «Davicine» en el AMFF 2023:
The Ordinaries
¿Te has sentido alguna vez como un personaje secundario en tu propia vida? ¿Y si realmente lo eres? The Ordinaries es una mezcla musical entre Pleasantville y la literatura juvenil a Los Juegos del Hambre donde se nos presenta una curiosa sociedad dividida en base a criterios narrativos en la que los «protagonistas» poseen más privilegios que los «secundarios».
Dirigida por Sophie Linnenbaum, cuenta en su reparto con Fine Sendel, Jule Böwe, Henning Peker, Sira-Anna Faal, Noah Tinwa, Denise M’Baye, Pasquale Aleardi, Noah Bailey y Martin Umbach. Filmin estrena la película el 24 de julio de 2023 en el marco de la décimo tercera edición de Atlàntida Mallorca Film Fest.
¿Metacine o la película de la vida?
En The Ordinaries, Paula y su madre viven en una sociedad dividida en tres clases sociales. Paula, que es una joven «secundaria», estudia y sueña con graduarse para convertirse en un «protagonista». Además, en su tiempo libre busca a su hace tiempo desaparecido e idolatrado padre y es así como entra en contacto con los «Tomas falsas», descubriendo una nueva y desconcertante realidad.
A veces vale la pena estar dispuesto a experimentar, y Sophie Linnenbaum emplea esta trama tan peculiar para una no menos pintoresca experiencia visual que a más de uno le recordará a las alocadas ideas de Charlie Kaufman en su forma de mostrar realidades cuanto menos atípicas. Curiosamente, son varias las películas que nos vendrán a la mente, en especial Cómo ser John Malkovich, con guion de Kaufman, aunque distan bastante en lo que se refiere a la forma de mostrar la conexión de los conceptos cinematográficos con nuestro mundo, sin olvidarnos de El show de Truman, de Peter Weir, de la que por momentos nos vendrán algunos recuerdos de Jim Carrey como un personaje principal de su propia «vida».
Surrealismo y realismo en el cine y en la vida
The Ordinaries puede resultar tan surrealista como sorprendente, tan irreal como cercana, orientada a recrearse especialmente en el apartado técnico del cine, desde el vocabulario a la puesta en escena de los personajes principales, secundarios y tomas falsas, acorde a cómo han llegado a ser lo que son.
Linnenbaum no ha necesitado de un gran presupuesto (ni siquiera de un presupuesto medio) para crear un largometraje atractivo, con una cantidad ingente de actores implicados en escenas de gran escala, donde no cesa de jugar con recursos estilísticos, empleo maravillosos del color y números musicales llamativamente coreografiados.
La idea de un mundo jerárquicamente estructurado de personajes cinematográficos suena pintoresca y emocionante a partes iguales, pero también de inicio puede sonar muy teórica. Tras un cortometraje que bien podríamos decir que fue su punto de partida, [Out of Fra]me, ahora se aventura a crear todo un metamundo a su alrededor en el que los personajes tienen vía libre para abordar sus emociones, practicar momentos musicales y de suspense, e incluso demostrar sus habilidades para gritar.
Una película a base de conceptos
A pesar del tiempo que uno pueda tardar en entrar en el juego que nos plantea, de lo que no hay duda es que resulta toda una experiencia satisfactoria, especialmente para los cinéfilos que disfrutarán con todos los conceptos que se tratan y la manera de exponerlos en pantalla a través de personajes de carne y hueso, demostrando que la propia vida que vivimos es la película que vemos, y la producción de esta película equivaldría a nuestra existencia.
Pero una buena película muchas veces debe dejarnos algo en lo que pensar, y The Ordinaries se preocupa de ocultar bajo su surrealismo una buena dosis de crítica social a modo de parábola de la lucha de clases con especial interés en las injusticias por culpa de la desigualdad de oportunidades y la exclusión según los orígenes de cada uno, además de preguntas existenciales sobre la autodeterminación de las personas más allá de las exigencias del guion. Con todo esto, es evidente que estamos ante una sátira política repleta de drama y comedia bajo una premisa de ciencia ficción, géneros combinados todos ellos de forma ágil y cambiando fácilmente de unos a otros según lo requiera la escena.
Secundarios al poder
Al frente del reparto, como protagonista principal, a pesar de ser una secundaria en su mundo con aspiraciones a más, tenemos a Fine Sendel como Paula, una joven capaz de exprimir al máximo un complejo personaje que requiere mostrarse repleta de inseguridades y dudas, con una permanente sensación de tristeza y una mirada asustada ante los retos que se la presentan. Atrapada entre dos clases sociales, muestra con veracidad la complicada situación en la que vive y su imposibilidad para encajar con el resto de la sociedad y dar lo que se espera de ella.
El resto de personajes podríamos decir que son secundarios en la película independientemente sean principales, secundarios o tomas falsas, pero debemos prestar atención a todos esos personajes que han sido descartados de los montajes finales, con fallos de edición, sonido o sencillamente sin presupuesto para ser digitalizados y permanecer en el mundo. Nunca unos personajes olvidados han tenido tanto que contar.
En resumen, The Ordinaries es una película tan original como audaz, que sin duda hará las delicias de los cinéfilos con las cientos de referencias a la historia del cine y la tecnología cinematográfica, mientras que otros espectadores apreciarán lo que expone de la lucha de clases aderezada con una historia sobre la mayoría de edad.
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The Ordinaries
