Las críticas de Laura Zurita:
Quédate a mi lado
La historia de la relación del periodista Michael Ausiello (Jim Parsons) y Kit Cowan (Ben Aldridge) da un giro trágico cuando a Cowan se le diagnostica un cáncer terminal.
Quédate a mi lado está dirigida por Michael Showalter e interpretada por Jim Parsons (Michael Ausiell), Ben Aldridge (Kit Cowan), Josh Pais (Scott) Allegra Heart (Franny), Jeffery Self (Nick), Sally Field (Marilyn) y Bill Irwin (Bob). La película se estrena en España el 9 de junio de 2023 de la mano de Universal Pictures Spain.
De comedia a drama, pero siempre romántica
Quédate a mi lado está basada en el libro de Michael Ausiello «Spoiler Alert: The Hero Dies: A Memoir of Love, Loss, and Other Four-Letter Words» (cuyo título destripa bastante y cuya traducción aproximada sería «El héroe muere: Memorias de amor, pérdida y otras palabras de corrientes»). Ausiello cuenta su historia de amor con Kit, una historia duradera, con los altibajos normales de la vida real, hasta que llegó la enfermedad de Kit. Jim Parsons se sintió atraído por la historia y, además de producirla, se reservó el papel de Michael Ausiello en la película.
Al principio Quédate a mi lado tiene formato de comedia romántica: chico conoce a chico, se gustan, e inician esa danza que llamamos amor. Lo hacen venciendo la timidez inicial, las obvias diferencias, y la dificultad añadida de la salida de (y entrada en) el armario. En esta primera parte se juega con los tópicos del género, añadiendo un tono de humor que la hace dulce y divertida, evitando el empalago. En ese tramo la historia tiene una levedad muy propia del género, con escenas divertidas y ligeras, como un soleado paisaje primaveral. Hay un giro importante cuando Kit visita la casa de Michael, una metáfora de cómo emprende el conocimiento de la vida y la mente del hombre algo atípica.
Quédate a mi lado se diferencia de otras películas en que no acaba en el momento de felicidad, en el que son felices y comen perdices, sino que la vida sigue y va trayendo más elementos a la historia, algunos bienvenidos, otros no. Poco a poco, la película va cambiando de tono, de comedia romántica a un drama romántico. Han pasado algunos años, y los personajes ya han entrado de lleno en la madurez. El tiempo y la cotidianeidad modifican el amor, y cualquier pareja en el público podrá reconocerse en los eventos de la vida de la pareja.
Personas imperfectas
Quédate a mi lado está bien montada, aunque el ritmo falla un poco en ocasiones. Hemos visto historias parecidas antes, pero los giros y las reacciones de las personas crean algo nuevo y diferente. Quédate a mi lado no sucede en un mundo irreal de sonrisas de dentífrico y camisas eternamente almidonadas, sino que está basada en la historia real de unas personas imperfectas, que hacen lo que pueden con la realidad con la que tienen que lidiar. Los momentos en los que se compara la realidad con escenarios de telenovela americana, con sofá incluido, son divertidas y refrescantes, recordándonos que la vida no es eso.
Buena parte del encanto de Quédate a mi lado deriva del acertado reparto. Jim Parsons está como pez en el agua en su papel de hombre de palo, inteligente y un poco chiflado, y hace guiños al recuerdo de la audiencia de su papel como Sheldon en The Bing Bang Theory, del que tardará muchos años en librarse. Despliega su talento para encarnar el lado más serio y triste de una historia y usa su don para la comedia para alegrar Quédate a mi lado, aun en sus momentos de drama. Ben Aldridge, como Kit, está perfecto en todo su arco dramático, y muy atractivo aún enfermo. También están estupendos Sally Field y Bill Irwin como los padres de Kit, que aprenden a querer a su hijo tal y como es en cada momento.
Quédate a mi lado es una comedia dramática dulce y chispeante que apelará al lado romántico del público. Un guion bien escrito y un estupendo reparto la hacen ideal para verla en buena compañía.