El director, guionista y productor aragonés Carlos Saura, reconocido por medio centenar de títulos como Cría cuervos, ¡Ay, Carmela! o La prima Angélica, será la próxima Medalla de Oro de EGEDA (Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales). El galardón, que se entregará en el marco de la 23 edición de los Premios José María Forqué (el 13 de enero de 2018) homenajea su extensa y exitosa trayectoria que abarca la dirección, el guion y la producción de títulos tan relevantes en la historia del cine como Tango, Bodas de sangre, y los ya citados, entre otros. Una filmografía por la que atesora cerca de un centenar de reconocimientos donde brillan con luz propia un premio BAFTA, un Oso de Oro y dos de plata como mejor director en Berlín, el Gran Premio del Jurado en Cannes y San Sebastián o dos premios Goya, por citar algunos.
Enrique Cerezo como Presidente de EGEDA ha sido el encargado de hacer público el nombre del realizador oscense en un acto de presentación de Los Forqué en la capital aragonesa; esta Medalla da así continuidad al espíritu potenciador del territorio que adquirió este reconocimiento desde la pasada edición cuando se distinguió al productor andaluz Antonio Pérez, celebrándose la gala en Sevilla.
El nombre de Carlos Saura pasa así a engrosar un largo listado de figuras ya galardonadas con esta Medalla de Oro, donde se encuentran nombres como los también aragoneses Eduardo Ducay y José Luis Borau, además de Fernando Trueba, Agustín Almodóvar, Santiago Segura, Pedro Masó, Elías Querejeta…
Carlos Saura, nacido en Huesca en 1932, es uno de los nombres con mayúsculas del cine mundial, un arte al que llegó de la mano de su otra pasión, la fotografía. Sus inicios en el mundo del cortometraje desembocaron en Los golfos, su opera prima donde colaboraba con otra figura del guion, Mario Camus. Esta película le valdría su primera participación en el Festival de Cannes, donde conocería a una de sus grandes influencias y aragonés como él: Luis Buñuel. Tras su debut llegarían innumerables títulos que le granjearían un puesto entre los más destacados cineastas. En 1983 estrenaría Carmen, con la que conseguiría un premio BAFTA además de luchar por el Globo de Oro y el Oscar. El largometraje ¡Ay, Carmela! (1990), por su parte, se convertiría en la película con más premios Goya de la historia con un total de 13; desde entonces sólo ha sido superada por Mar Adentro de Alejandro Amenábar (14). Con la llegada del nuevo siglo, su acercamiento al mundo de la danza ha sido una constante con obras como Salomé, Iberia, Fados o Flamenco, Flamenco. Su más reciente trabajo detrás de las cámaras, Jota de Saura, además de grandes críticas, fue candidata a mejor documental en la pasada edición de los Forqué. Además, este icono de la cinematografía española cuenta con el reciente estreno de Saura(s), un retrato fílmico del maestro dirigido por Félix Viscarret donde se nos muestra al Carlos más íntimo a través de conversaciones con sus propios hijos.