Con un poco de retraso, pero llega la hora de narrar lo acontecido en el último día de festival. Una mezcla de emociones contrastadas me invadía. Por un lado me apenaba que la gran semana del cine fantástico se acabase, pero por otro estaba deseando llegar a casa y darme friegas de alcohol de romero en los cuádriceps, y tomar cereales de fibra para darle una alegría a mi tracto intestinal. Han sido nueve días de solecito y lluvia, de estrellas y estrellados, 41 películas visionadas, cuatro entrevistas realizadas, muchas migas deglutidas y litros y litros de bebida energética miccionada. ¿Ha merecido la pena? Por supuesto. Por acudir a Sitges sería capaz de dormir en una furgoneta, ducharme en la playa o hacer mis necesidades en escusados purulentamente roñosos si fuese necesario. Sitges es el templo del aficionado al cine de género, y aunque a veces te tengas que tragar infames bodrios, descubrir peliculones como I am a hero, The Gift, Tag, Assassination o Veteran no tiene precio.
Y hablando de peliculones, menuda sorpresa me llevé al ver Baahubali – The beginning. Es como si cogieras lo mejor del cine de Bollywood y lo mezclaras con Chuck Norris, añadiéndole un frasco de Baron Dandy y una buena dosis de molonidad extra. La película (la más cara de la industria hindú) es un despropósito tronchante, con reminiscencias al mejor cine ochentero americano (ríete tu de Los Mercenarios), unos efectos especiales/digitales espectaculares (aunque alguno que otro queda un poco cutroncete), un nivel de molonidad que se sale de las gráficas, unas interpretaciones de lo más forzadas y el flashback más largo de la historia del cine (diría que el flashback es más largo que el resto de la peli). La cuestión es que todo esto, que a priori suena fatal, es lo que la hace magnífica. A pesar de que la intención original no sería hacer reír al espectador, la realidad es que te vuelves loco con las legendarias idas de olla e histrionismos épicos que te plantan en las narices. Toda la película es como un larguísimo anuncio de Fa (pelo ondulante bajo una cascada al atardecer, en slow motion), con unos guapérrimos protagonistas (según los cánones indúes) que luchan, cantan y bailan con mucho flow.
La historia es bastante clásica: el héroe perdido, que descubre su identidad y lucha contra los malos para confirmar la leyenda que el oráculo de turno predijo años atrás. Lo hemos visto mil veces, pero no de esta forma ¡Tenéis que verla!
Como punto negativo, la misoginia que desprende. Es absurdo el viaje de la heroína de la peli: pasa de férrea guerrera a doncella desvalida, de arquera invatible a dama en apuros. Así, sin ton ni son. Todo esto promovido por nuestro héroe, Shividu, un mostachudo pecholobo que mola más que toda la plantilla del Real Madrid.
En definitiva, Baahubali es una película perfecta para ver entre amigos. Es muy divertida, tiene escenas de acción épicas y no abusa de los típicos bailes (solo hay 2, y muy bien situados).
Para contrarrestar el subidón vi Dragon Ball Z: Resurrection F, un truño como la copa de un pino que demuestra que Akira Toriyama se merece la jubilación. Si la anterior entrega no era demasiado buena en cuanto a las luchas, pero si que tenía un punto nostálgico muy molón, esta no tiene ni eso. Una película con argumento forzado, luchas anodinas y una épica inexistente (hay una nueva fase de supersayan, pero te la presentan sin prolegómenos ni nah). Desprende otro porquito de misoginia (A-17 no va a luchar para quedarse en casa con su hijita, mientras el esmirriado de Krilin va a ver si lo matan por enésima vez), y planta personajes nuevos en escena sin presentación previa (me refiero al policía intergaláctico. ¿Desde cuándo hay Green Lanterns en el universo Dragon Ball?).
Como punto positivo la aparición de Mutenroshi y un par de chistes bien metidos. El resto no merece la pena.
Tras semejante despago, fui a la sala Tramuntana para ver February, película de terror que no da miedo. Nos cuenta la historia de tres chicas (dos internas en una escuela de monjas, otra que vagabundea por ahí). Las colegialas se quedan solas en el internado porque sus padres no las recogen por vacaciones (vacaciones en Febrero. Yo también las quiero), y la vagabunda se monta en el coche de unos ancianos que la invitan a cenar y a un hotel (muy majos los jubetas norteamericanos). De repente la colegiala más jovencita empieza a hacer cosas raras, y la mas mayor se asusta mucho. Hay un par de giros (malos), alguna muerte y un pseudoexorcismo. Fin. Ya os la he contado, así que no la veáis. Lenta, aburrida y sin sorpresas.
La siguiente sesión fue una maratón anime que contenía dos películas de Ataque a los titanes (El arco y la flecha escarlatas, y Las alas de la libertad). Ambas películas son un resumen de la primera temporada de la serie. Así, sin más. Se cepillan algunas subtramas, obvian cierta información y quitan muchísimo relleno. Aquellos que no hemos seguido la serie (tan solo he visto los primeros cinco capítulos) lo agradecemos (porque en esos capítulos hay toneladas de histrionismo y relleno), pero los seguidores del serial se quedarán muy despagados si no saben a lo que van. Son dos horas por película, entretenidas y dinámicas. Una muy buena forma de acercarse al universo de Attack on titans.
Y con sueño, dolor de piernas y parón estomacal despedí Sitges 2015, una edición que se ha caracterizado por el gran numero de thrillers y comedias y por las pocas pelis 100% fantásticas. Para próximos años espero que seleccionen más cintas de genero, y que mejoren la pantalla y la sala Tramuntana. Por lo demás, me voy feliz. ¡Ya estoy deseando que llegue Sitges 2016! Y sin más, os dejamos con el palmarés:
Secció Oficial Fantàstic Sitges 48
- Premio Mejor Película: The Invitation de Karyn Kusama
- Premio Especial del Jurado: The Final Girls de Todd Strauss-Schulson
- Premio Mejor Dirección (patrocinado por Gas Natural Fenosa): S. Craig Zahler por Bone Tomahawk
- Premio Mejor Interpretación Femenina: Pili Grogne por Le tout nouveau testamento
- Premio Mejor Interpretación Masculina (patrocinado por Autolica – Mercedes Benz): Joel Edgerton por The Gift
- Premio Mejor Guión: M. A. Fortin, Joshua John Miller por The Final Girls de Todd Strauss-Schulson
- Premio Mejores Efectos Especiales: Makoto Kamiya por I Am a Hero de Shinsuke Sato
- Premio Mejor Fotografía: Pawel Flis por Demon de Marcin Wrona
- Premio Mejor Música: Jean-Philippe Bernier, Jean-Nicolas Leupi, Le Matos por Turbo Kid
- Premio Mejor Cortometraje (patrocinado por Fotogramas): They Will All Die in Space de Javier Chillon
- Gran Premio del Público (patrocinado por La Vanguardia): I Am a Hero, de Shinsuke Sato
- Premio José Luis Guarner: Bone Tomahawk de S. Craig Zahler
- Premio Citizen Kane al Mejor Director Novel: Stephen Fingleton por The Survivalist
- Premio Jurado Carnet Jove Mejor Película: Turbo Kid de Anouk Whissell, François Simard, Yoann-Karl Whissell
Secció Oficial Fantàstic Òrbita
- Premio Mejor Película: SPL2: A Time for Consequences de Soi Cheang
- Premio Mejor Dirección: John Maclean por Slow West
- Premio Especial del Jurado: The Taking of Tiger Mountain de Tsui Hark
Panorama Fantàstic
- Premio Mejor Película Panorama Documenta: Lost Soul – The Doomed Journey of Richard Stanley s Island of Dr. Moreu de David Gregory
- Premio del Público: El Eslabón Podrido de Valentín Javier Diment
Noves Visions
- Premio Mejor Película Noves Visions One: Anomalisa de Charlie Kaufman, Duke Johnson
- Mención especial Noves Visions One: Men & Chicken de Anders Thomas Jensen
- Premio Mejor Cortometraje Noves Visions: Disco Inferno de Alice Waddington ex aequo con Formas de jugar de Gemma Blasco
- Premio Mejor Película Noves Visions Plus: Anabel de Antonio Trashorras
- Mención especial: Lovemilla de Teemu Nikki
Focus Àsia
- Premio Mejor Película: Veteran de Ryoo Seung-wan
Anima’t
- Premio Mejor Película: Miss Hokusai de Keiichi Hara
- Premio Mejor Cortometraje: Voltaire de Jan Snoekx
- Mención especial Cortometraje: The Orchestra de Mikey Hill
Midnight X-Treme
- Premio Mejor Película: Bound to Vengeance de José Manuel Cravioto
Méliès d’Argent
- Premio Mejor Película Europea S.O.F. Sitges 48: Le Tout Nouveau Testament de Jaco Van Dormael
- Premio Mejor Cortometraje Europeo S.O.F. Sitges 48: Graffiti de Lluís Quílez
Blood Window
- Premio Mejor Película Blood Window: Los parecidos de Isaac Ezban
Brigadoon
- Premio Mejor Cortometraje Brigadoon – Paul Naschy: Caradecaballo de Marc Martínez Jordan
Phonetastic
- Premio Mejor Cortometraje: Blackout de Sylvain Certain
Sitges Cine365 Film
- Premio Sitges Cine365 Film: Caradecaballo de Marc Martínez Jordan ex aequo con Zero de David Victori