
La diva ha iniciado las conversaciones con los ejecutivos de Disney para poder encarnar a Delories Van Cartier, una cantante que tiene que hacerse pasar por monja para huir de unos mafiosos. Si el proyecto sale adelante, el rodaje no empezará hasta finales de 2011. Mientras tanto, en un descanso de su gira I am Sasha Fierce tour, Beyoncé ha asistido a la adaptación al musical de la película en el West End en Londres.
Sin duda si el proyecto finalmente se realiza, tendremos una monja con mucha mejor voz que en las dos primeras películas, aunque una vez más los remakes dejan en entredicho la supuesta originalidad de los guionistas de Hollywood.