Las críticas de David Pérez «Davicine»:
La combinación perfecta
Tras un despido muy sonado, el regreso de Jenna al mundo de la moda se complica cuando se enamora de un compañero mucho más joven que ella… y que resulta ser el hijo de su jefa. Aunque tengan mucha química, Jenna debe decidir si vale la pena arriesgarlo todo por un amor secreto.
Basada en el libro de Tia Williams, Numa Perrier dirige La combinación perfecta, con guion de Leigh Davenport, y en cuyo reparto figuran Gabrielle Union, Keith Powers, Gina Torres, Aisha Hinds, D.B. Woodside, Janet Hubert y Alani «La La» Anthony. La producción corre a cargo de Glendon Palmer, Gabrielle Union, Jeff Morrone, Codie Elaine Oliver y Tommy Oliver. La película se estrena en Netflix el 23 de junio de 2023.
Nunca falta romance en Netflix
Netflix sabe que el veranito es una época idónea para refrescar el catálogo con romances, y por eso lo mismo estrena un romance juvenil como A través del mar, repleto de conflictos de pareja, que una comedia optimista tan dulce como picante como es Una imagen para creer, o la multitemática La combinación perfecta para satisfacer la demanda de aquellos espectadores que no tienen suficiente dosis de edulcorante romántico en las teles.
Lo mejor de todo es que estas tres películas se han estrenado a la vez, y aunque tengan los romances como punto de partida, son historias muy diferentes que también pueden llegar a públicos distintos. A diferencia de A través del mar, que ya se planteaban los problemas que tenía la pareja protagonista, o Una imagen para creer, en la que dos abuelas entrometidas orquestan una historia de amor entre sus nietos, en La combinación perfecta tenemos a sus protagonistas enamorados casi a primera vista, aunque la edad en esta ocasión es la que plantea los dilemas para seguir adelante con su romance.
Así, tras una ruptura pública muy complicada y un despido sonadísimo, Jenna (Gabrielle Union) vuelve a Nueva York para retomar su carrera profesional en el mundo de la moda. Consciente de que solo tendrá una oportunidad para lavar su nombre, Jenna se traga el orgullo y empieza a trabajar a las órdenes de la despiadada Darcy (Gina Torres). Pero todo se complica cuando se enamora de Eric (Keith Powers), un compañero de encantador mucho más joven que ella… y que resulta ser el hijo de su jefa. Después de tanto sacrificio por su trabajo, Jenna no sabe si arriesgarlo todo por un amor secreto ni si su relación con Eric tiene futuro con esa brecha generacional entre ambos.
La credibilidad está sobrevalorada
No son pocas las películas en las que la diferencia de edad de sus protagonistas supone un problema en su relación, especialmente por el entorno de alguna de las partes, pero aquí agregan un extra de conflicto al ser el joven de la pareja el hijo de la jefa de su objetivo romántico. Esto es una coincidencia excesivamente forzada, sobre todo al no haberse conocido en el puesto de trabajo, pero cuando hablamos de comedias románticas, la credibilidad nunca es algo que se necesite ni se valore en exceso.
Tener que mantener la relación en secreto por el «qué dirán» podría haber hecho que la película jugase con este mensaje y todo girase alrededor de este tema, pero realmente no han sabido sacar tanto provecho a este conflicto, ni siquiera con el hecho de ser ella la mayor, algo que no es tan normal en el cine. Al final, esa diferencia de edad entre ella y él se emplea para algunas bromas juguetonas, pero no exprime lo que podría haber elevado el nivel de la historia romántica aunque logra transmitir buenos mensajes sobre no renunciar a los sueños, sin importar la edad que se tenga.
Muchos temas y poco desarrollo
Junto a la diferencia de edad y lo ético que es salir con el hijo de tu jefa, otros temas son mostrados pero no desarrollados, como el tema del nepotismo, la promoción de la moda actual o la historia del cine afroamericano, pero quedan en destellos que pasan fugazmente por nuestra tele y se desvanecen como nuestro interés en la relación de los protagonistas. Quizás, por culpa de estos temas, y su forma de tratarlos, es difícil saber quién es el público objetivo, pues los amantes de las comedias románticas tradicionales verán un exceso de información sobre la historia del cine, mientras que los cinéfilos disfrutarán con esta pequeña carta de amor al viejo Hollywood pero acabarán saturados con su historia tan cursi.
En lo que respecta a los personajes, la película falla tal y como los representa, o más bien cómo reaccionan y piensan que son las cosas, desde el apodo que ponen los amigos del joven Eric a la madura Jenna sin que él apenas la defienda, o la idea que Eric tiene de cómo se depilaría una mujer de la edad de Jenna, con una concepción totalmente arcaica de ella que choca con los tiempos que corren. Curiosamente, a pesar de ser real la diferencia de 20 años de edad entre ambos, pues Gabrielle Union tiene 50 años y Keith Powers tiene 30 actualmente, ella luce tan atractiva y jovial que apenas notamos realmente esa diferencia de 20 años entre ambos, motivo por el que se recalca en exceso en el guion que tienen mucha diferencia de edad.
Es una lástima que entre ambos no veamos el tipo de química que esperamos de una comedia romántica, lo que no se si es por querer reflejar la necesidad de los personajes de mantener su relación en secreto o sencillamente un error de guion o dirección. Pero sea por lo que sea, al fin y al cabo es un error en una película de este género, a pesar de haberse esforzado la directora en aportar un estilo visual deslumbrante a la película, con una fotografía impecable y decisiones creativas de primer nivel, desaprovechadas en una producción como ésta.
En resumen, La combinación perfecta es quizás una de las mejores películas románticas estrenadas esta semana en Netflix, pero eso no es mucho decir. A pesar de tratar temas interesantes en los que ha evitado profundizar, y un estilo visual delicioso, caerá en el olvido tan pronto desaparezca de lo más visto en la plataforma sin generar un posible interés futuro en los espectadores dentro de un tiempo.