Las críticas de David Pérez en Another Way Film Festival 2024:
Black Snow
El festival de cine sobre progreso sostenible Another Way Film Festival se celebra en la ciudad de Madrid de forma presencial, y en España en formato online, del 16 al 22 de octubre de 2024. Para celebrar el décimo aniversario del festival se ha preparado una selección de películas frescas y audaces cuyo fin es desafiar, inspirar y unir a todas aquellas personas que buscan el cambio, convirtiendo el acto de acudir al cine en una experiencia que deje huella entre todos los y las asistentes.
Desde Another Way Film Festival se defiende la justicia climática, se celebra la diversidad e igualdad y se apoyan estas voces. Por eso, los 37 títulos elegidos para esta edición, repartidos entre documentales, películas de ficción y cortometrajes, giran en torno a temáticas como el cambio climático, la globalización y sus consecuencias, la defensa de los derechos humanos, nuestra relación con el entorno rural, el activismo y la justicia climática.
Cuando los habitantes de una remota ciudad siberiana descubren que una antigua mina soviética se ha incendiado debajo de su vecindario, recurren a Natalia Zubkova, una ama de casa local convertida en periodista, en busca de ayuda. Pero al hacerse virales sus vídeos de noticias, Natalia se convierte en el blanco de una campaña masiva de desinformación del gobierno. Black Snow es un apasionante y revelador thriller que sigue a Natalia mientras se embarca en un peligroso viaje para descubrir el alcance total del desastre ambiental que se desarrolla en su región, poniendo en peligro su propia seguridad y la de su familia.
Una historia que no interesaba contar a todos
El debut cinematográfico de Alina Simone en el cine documental nos ofrece una imagen profunda de la Rusia actual, mostrando la vida de los ciudadanos comunes alejados de los intereses políticos. Esta mirada llega en el seguimiento que se realiza de la vida de Natalia Zubkova, madre de tres hijos que aprende que hacer preguntas incómodas es peligroso.
Al igual que sus vecinos, Natalia vive en una zona donde es fácil que crezca la conciencia ambiental como consecuencia del agua que usaba en su hogar y los problemas de salud causados por las enormes minas de carbón a que rodean la ciudad en la que vive y son el motivo de muchas anomalías naturales. Sus quejas son obviadas y la frustración ante la falta de interés por mejorar su situación provoca que Natalia comience a documentar los acontecimientos que la rodean grabando todo con su viejo teléfono móvil y colgando sus grabaciones en la red.
La mirada sobre los afectados y no sobre el problema
El crecimiento de las manifestaciones no solo no provoca que las autoridades investiguen lo que sucede, sino que muestran más interés por ver quién protesta y, especialmente, quien lidera las protestas. La coacción entra en juego y se empieza a meter el miedo en el cuerpo de quienes osan quejarse de los problemas que acontecen en su zona. El objetivo de las autoridades es llegar a Natalia Zubkova, y su vida se torna cada vez más difícil hasta el punto de recibir amenazas de muerte contra ella y sus hijos, teniendo que abandonar la ciudad para salvarse ella misma y sus hijos.
Todo esto consigue ser mostrado de forma eficaz en Black Snow, planificado como un thriller político que nos atrapa en esta historia emotiva y tensa, a la par que ilustrativa sobre la sociedad rusa actual. Con gran acierto, y capacidad para atraer a espectadores poco asiduos a los documentales, esta película consigue combinar la tensión y la emoción con el dramatismo mientras nos mantiene alerta con todos los inesperados giros que incluye.
En resumen, Black Snow es un thriller osado que cuenta una historia que muchos querían tapar, la historia de una mujer valiente y el precio que debe pagar para luchar contra el daño medioambiental que sufre su ciudad.
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Black Snow
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