Las críticas de Laura Zurita:
Háblame
La solitaria adolescente Mia se engancha a la emoción de invocar espíritus utilizando una mano embalsamada, pero cuando se enfrenta a un alma que dice ser su madre muerta, desata una plaga de fuerzas sobrenaturales y se debate entre decidir en quién puede confiar: en los vivos o en los muertos.
Háblame está dirigida por los hermanos gemelos Danny ye interpretada por Ari McCarthy, Hamish Phillips, Kit Erhart-Bruce, Sarah Brokensha, Jayden Davison, Sunny Johnson, Sophie Wilde, Marcus Johnson, Kidaan Zelleke y James Oliver. La película se estrena en España el 11 de agosto de 2023 de la mano de Diamond Films España.
Lo sobrenatural como adicción
Los adolescentes tienen poco sentido del riesgo y a menudo son, a los ojos de cualquiera que no tenga su edad, imprudentes. En Háblame un grupo de adolescentes se entregan a unos juegos con el mundo de los espíritus llenos de riegos, pero que parecen ser adictivos.
En un retrato generacional, cercano y realista, el juego de los chicos con lo sobrenatural se vuelve viral. El espectador percibe algo que los adolescentes parecen ignorar, que lo que sucede es terrorífico y va a tener consecuencias, lo que contribuye en arado sumo a la sensación de incomodidad y miedo. Esa atmósfera de incomodidad, en la que el terror parece asomar por doquier, tomando formas extrañas e inusuales, es lo que hace Háblame tan efectiva como película de terror. Pasamos miedo de veras, envueltos en una historia triste y dramática, y no por una serie de sustos más o menos efectista.
Los directores han trabajado mucho con un canal de Youtube, y Háblame es su paso a la gran pantalla. Es sorprendente que su debut sea una obra tan rotunda y tan madura, sin rastro de espita youtubero. Los hermanos Philippou han sabido combinar su creatividad con un dominio sofisticado del lenguaje cinematográfico, y rodearse de un quipo técnico competente. Llevan su película con sobriedad y un enfoque original y dramático sobre lo sobrenatural. El final es sorprendente y desolador; en muy pocos minutos y con pocos medios se nos describe un destino triste e irrevocable, al tiempo que la historia principal adopta un nuevo y sobrecogedor ángulo.
Mía es al tiempo egoísta y víctima
Háblame habla de personas reales, con problemas reales y un trasfondo trágico. Mía, nuestra protagonista, es una persona herida, porque su madre murió en terribles circunstancias. Esta tristeza la convierte a la vez en víctima y artífice de un juego falaz. Los espíritus no son entidades fiables, que nos den respuestas francas al ser invocados, tienen su propia agenda, y usan a las personas que creen que los están usando a ellos. La película se ha hecho con un presupuesto relativamente modesto para una producción de este tipo.
Los directores, con gran inteligencia, se adaptan a su limitado presupuesto y crean miedo con un uso imaginativo de la dirección. Háblame no abusa de efectos especiales digitales, y construye la tensión y el terror utilizando enfoques, movimientos de cámaras, planos cortos y dejando que la imaginación del espectador, complete el cuadro.
La dirección de actores es notable, los directores consiguen que los jóvenes actúan con naturalidad y sin esos excesos en los que caen los intérpretes en cintas de género más convencionales. En el reparto destaca la joven protagonista, Sophie Wilde como Mía, con su aire triste y solitario. También el joven Zoe Terakes como Hailey, resuelve con mucho talento un papel físicamente muy exigente, y su aspecto desamparado hace aún más terrible la manera en la que es maltratado durante la cinta.
Háblame es una película de terror, dramática y rotunda, con un enfoque original y un acertado sentido del ritmo. Profundamente dramática e inquietante, consigue dar miedo y emocionar mucho más que las películas de sustos al uso.