Las críticas de David Pérez «Davicine»:
Siete reyes deben morir
Tras la muerte del rey Eduardo, Uhtred de Bebbanburg y sus compañeros recorren un territorio fracturado con la esperanza de unificar Inglaterra de una vez por todas. Siete reyes deben morir es el final de la serie The Last Kingdom en formato de largometraje. Con Alexander Dreymon, que también es su productor ejecutivo, y dirigida por Edward Bazalgette, completan el reparto Harry Gilby, Mark Rowley, Arnas Fedaravicius, Cavan Clerkin, James Northcote, Laurie Davidson y Elaine Cassidy. La película se estrena en Netflix el 14 de abril de 2023.
Punto final a The Last Kingdom
Cuando The Last Kingdom se estrenó en 2015 fue una grata sorpresa, llegando en un momento en el que Vikings del canal Historia funcionaba muy bien, especialmente por sus actores carismaticos, su nivel de producción sobresaliente y una buena puesta en escena tanto visual como de acción.
Estaba claro que muchos pensaron en ese momento que The Last Kingdom era tan sólo una serie creada por la BBC para aprovechar el tirón de Vikings y arrastrar espectadores con un fenómeno de moda, pero su éxito fue tal que Netflix se hizo cargo de la serie con dos temporadas a sus espaldas y ahora, tras cinco temporadas y una buena cantidad de adeptos, llega una película que sirve de secuela de la serie de televisión y como capítulo final de la historia.
Una historia muy completa y conclusiva
Siete reyes deben morir, cuyo título original es The Last Kingdom: Seven Kings Must Die, se presenta como una película con una duración de dos horas y cuenta una historia fantástica, manteniendo los ingredientes que hicieron que la serie consiguiese su éxito, combinando acción, traición, amor y guerra. En ella nos cuentan como, durante un siglo, la guerra entre los habitantes de Inglaterra y los invasores daneses ha asolado las islas. Ahora, una frágil paz reina en un país casi completamente unido.
Solo Uhtred de Bebbanburg se resiste a vincular Nortumbría al trono. Pero tras la muerte del rey Eduardo, el conflicto entre los dos potenciales herederos de la corona, Aethelstan y Aelfweard, amenaza con malograr esa estabilidad. Cuando Uhtred se entera de que Aethelstan —que fue su protegido— va a tomar las armas, decide acudir en su ayuda. Pero el joven príncipe ha sucumbido ante cierta influencia nefasta y ya no es el mismo chico que conoció Uhtred. Llegado el punto en que los actos de Aethelstan ponen en peligro la vida que Uhtred siempre ha defendido, este debe decidir dónde depositar su lealtad: con el rey o con su patria.
Entretanto, un nuevo peligro se cierne sobre el país con la llegada del rey guerrero danés Anlaf, que pretende sembrar el caos y aprovechar la discordia para sus propios fines. Mientras los actos de Aethelstan le granjean enemigos a lo largo y ancho de las islas británicas, Anlaf consigue forjar una alianza de los adversarios del rey que amenaza la visión de una Inglaterra unida. Y cuando la alianza solicita la ayuda de Uhtred para llevar sus planes a buen puerto, este tiene que elegir entre las personas que más quiere y el sueño de un reino unificado.
Manteniendo el nivel de la serie
Tanto el director Edward Bazalgette como la guionista Martha Hillier son muy conscientes del peso de su responsabilidad con Siete reyes deben morir, que claramente encaja dentro de la serie, y tenemos ante nosotros lo que nos daba la serie a nivel visual, pero también en lo que respecta a sus guiones y el reparto, aunque la producción es incluso mejor al invertirse todo en tan sólo una película.
Detrás y delante de las cámaras tenemos a parte del equipo de la serie, encabezado por su director, y todos sabían que era el adiós para la historia y los personajes, por lo que no querían defraudar a sus fans con este «episodio especial» que concluye lo conocido de manera épica.
Nadie ha querido faltar
Alexander Dreymon ha sido Uhtred de Bebbanburg durante casi una década, creando a lo largo de los años un personaje mítico desde su creación y moviéndose a la perfección en los escenarios creados para la ocasión, siendo un personaje convincente y realista que vuelve a mantener sus señas de identidad, desde la obstinación y bravuconería hasta el heroísmo y su profunda humanidad.
Este personaje merecía un final digno, y Dreymon se encarga de concluir el personaje que ha definido su carrera durante muchos años, con un amplio repertorio de emociones que lo hacen creíble, prueba de lo gran actor que es aunque no tenga un palmarés que lo respalde.
De la misma manera, es agradable poder despedirse otros personajes a quienes hemos acompañado durante años, brindando una oportunidad única de verlos marcharse por la puerta grande, teniendo algunos especial relevancia en este desenlace, como es el caso de Harry Gilby como Aethelstan.
Uthred es un personaje ficticio, al igual que Finan, Sihtric y otros compañeros de aventuras, mientras que Eduardo, Alfredo, Costantino, Aethelstan y demás gobernantes son personajes históricos reales, y la película se encarga de reforzar la línea divisoria entre realidad y ficción para que quede clara pero justificada narrativamente.
En resumen, Siete reyes deben morir es una película épica que sella el destino de Uthred, realizada claramente para los fans de The Last Kingdom que querían ver un final épico tras cinco temporadas, siendo imprescindible haber visto la serie para disfrutarla aún mas. De forma impecable, esta película concluye la saga televisiva de la mejor manera posible, combinando épica, emociones y realismo histórico para otorgar un final excelente a la serie de televisión.
¿Qué te ha parecido la película Siete reyes deben morir en Netflix?
Siete reyes deben morir
Estoy muy enfadada. La película me ha gustado tanto como la serie, pero después de ver sufrir a Uhtred durante cinco temporadas y que saliera con vida, no es justo tener que verle morir ahora 😂