Últimamente se está hablando mucho de Arabia Saudí, pero no por ser una de las grandes reservas de petróleo del mundo, sino por la falta de derechos que tienen las mujeres en ese país, donde no pueden votar ni realizar muchas funciones sin un tutor. Por nuestra parte, os preguntaréis por qué hablamos de este país si nosotros tratamos de cine, y ahí radica el tema. Después de 35 años, ha vuelto a proyectarse una película en cines, un hito sin precedentes, aunque aún más sorprende ha sido la película elegida, pues se han decantado por Emoji: La película.
El evento no fue por todo lo grande como cabría esperar, sino que se presentó en un pequeño espacio en la ciudad de Jeddah con el tamaño similar al de una sala de cine, donde ubicaron un proyector y no faltaron la pertinente alfombra roja y una máquina de palomitas. Los espectadores pudieron «disfrutar» de esta película como parte de un movimiento que ha surgido para que se empiece a ver al país como un lugar más libre.
De cara al futuro, podemos estar hablando de un buen incremento en los beneficios de los estudios, pues el plan de las autoridades de Arabia Saudí es abrir cerca de 300 salas de cine para 2030, aunque viendo la elección de la primera película, que ha sido vapuleada por la crítica, no se si realmente tendrán ganas de seguir acudiendo a los cines.
En relación a Emoji la película, recordemos que en ella descubrimos los secretos nunca antes vistos del mundo interior de tu smartphone. Oculta tras la aplicación de mensajes de texto, Textópolis, es una ciudad bulliciosa en la que conviven todos tus emoticonos preferidos, a la espera de ser seleccionados por el usuario del teléfono. Se trata de un mundo en el que cada emoji tiene una única expresión facial, salvo en el caso de Gene, un entusiasta emoji que nació sin filtro alguno y tiene distintas expresiones. Dispuesto a ser “normal” como todos los demás, Gene pide ayuda a su mejor amigo “Choca esos 5” y el descifrador de códigos de mala fama, “Rebelde”. Juntos, se embarcarán en una épica “app-ventura” paseándose por todas las apps del teléfono, cada una en su contexto alocado y divertido, para dar con el código que reparará a Gene. Pero cuando surge una amenaza inesperada que pondrá en peligro al teléfono, el destino de todos los emojis dependerá de estos tres amigos que harán todo lo posible por salvar el mundo antes de que sea eliminado para siempre.
Fuente: Reuters