Esta nueva versión, que bien podríamos llamar remake, está dirigida por Kimberly Peirce (Boys don’t cry) y protagonizada por Chloë Grace Moretz (Kick-Ass) como Carrie y Julianne Moore como su madre.
Carrie nos traslada al tranquilo barrio de Chamberlain (en Maine), donde viven la profundamente religiosa y conservadora Margaret White y su hija Carrie, siendo ella una chica dulce pero marginada, porque Margaret la ha sobreprotegido y aislado de la sociedad.
La profesora de gimnasia intenta proteger a Carrie de sus compañeras de clase, que la humillan y amenazan, pero Carrie es invitada al baile de graduación por el chico más guapo de la escuela, aunque todo es un engaño para humillarla en público.
La ira que provocan en Carrie la llevará a vengarse de ellos usando sus poderes telequinéticos, hasta ahora ocultos en su interior.