A veces la vida te da sorpresas y te regala oportunidades que no puedes dejar pasar. El viernes pasado me trasladé a Madrid para asistir a la master-class que impartió Javier Olivares en la Escuela de Guionistas de Madrid (la cual, por cierto, fue una delicia). Al finalizar la ponencia cogí el metro, y en mi estación de destino me crucé con Ginés Garcia Millán, actor más que prolífico con el que me he reido gracias a Matrimonio con hijos y con el que me hierve la sangre por su papel en Isabel. Menuda casualidad: unos minutos antes había charlado con el jefe de guionistas de la serie en la que Ginés García actua como antagonista ¿Cómo resistirse a charlar con él? De ese encuentro surgió una entrevista, la cual os traigo íntegramente en formato de texto. Espero que la disfruteis leyendola tanto como yo disfruté haciendola.
¿En que proyectos estás involucrado actualmente?
Actualmente se puede ver en televisión la serie Isabel, la cual ya está grabada pero con la que todavía estamos disfrutando de su emisión, yo al menos. No había visto ningún capítulo y la verdad es que estoy muy contento y muy orgulloso del resultado final.
También estoy en las Naves del Matadero de Madrid con una versión de La Gaviota de Daniel Veronese, que se llama Los hijos se han dormido.
Además, recientemente he vuelto de grabar una película en Mexico, que se llama 5 de mayo: La batalla, dirigida por Daniel Lara, y también he grabado una película en Irlanda.
En Isabel interpretas a un personaje con mucho peso en la trama. ¿Te has preparado el papel de alguna forma especial?
Cuando estás involucrado en una serie histórica tienes que leer un poco sobre el contexto social y político de la época. En este caso se trata de un momento de nuestra historia apasionante, lo cual hacía que hacer la serie, es decir, hacerla bien, era todo un reto. No obstante la base es el guión, porque aunque esté basado en una época histórica real no hay que olvidar que es ficción.
Además de la documentación también he tenido que prepararme a nivel físico, manejando armas y trabajando con caballos.
Isabel está siendo todo un éxito a nivel nacional. ¿Por qué crees que una serie como Isabel triunfa tantísimo y otras series como Piratas, por ejemplo, no funcionan?
Bueno, Piratas es una serie de ficción, que no se basa en hechos reales. En cambio Isabel recrea uno de los periodos más apasionantes de nuestra historia, y era un gran reto hacerlo bien. Que la serie sea interesante es gracias al peso de los guiones. Creo que el trabajo de Javier Olivares es muy bueno, de modo que consigue captar el interés del espectador y que éste se apasione, aún sabiendo lo que va a pasar. Esto es gracias a que los personajes están muy bien diseñados, con los que el espectador empatiza.
Estamos acostumbrados a verte en papeles dramáticos y/o costumbristas, pero en cambio apenas has interpretado personajes cómicos. ¿Es decisión tuya o es algo que viene dado?
Es algo que me ha venido dado. He tenido la suerte de hacer papeles muy interesantes, en televisión y teatro sobre todo (quizá falta ese personaje con más peso en el cine), pero cuando me ha llegado la oportunidad de hacer un papel cómico como en Matrimonio con hijos he disfrutado mucho, me lo he pasado muy bien, y creo que si hubiera tenido la oportunidad de interpretar papeles más cómicos los hubiera disfrutado y los hubiera defendido (creo) que bien.
Me considero un payaso, aunque todo el mundo se piensa que soy muy serio y que tengo mala leche, jajajaja.
¿Tienes predilección por algún tipo de papel en concreto?
No, para nada. Prefiero los papeles que sean interesantes para mí como actor y que me hagan crecer como persona, que me hagan aprender algo, los que me hagan disfrutar, que estén bien dibujados…
¿Hasta que punto, como actor, tienes algo que aportar al personaje frente al guión establecido?
Creo que el actor también es parte de la creación del personaje. El personaje puede estar muy bien escrito, pero el actor aporta muchísimas cosas. Y sobre todo, los personajes en la ficción televisiva (que tienen un desarrollo más largo) cambian gracias a que se establece un equipo muy interesante entre el guionista, el director y el actor, porque el guionista lo crea pero el personaje va creciendo poco a poco, y al final no hay nadie que lo conozca mejor que tú como actor. Cuando se empieza una serie solo te llegan 2, 3 o, como mucho, 4 capítulos guionizados, por lo que a partir de este momento el personaje se desarrolla y es ahí donde puedo aportar más cosas.
En lo últimos años las series de televisión han ganado adeptos, pero sobretodo con series extranjeras, quedando un poco relegadas las nacionales. ¿A que crees que se debe?
Creo que desde hace ya varios años se están haciendo series con bastante calidad y muy interesantes. Estamos en el camino de hacer series al nivel de las norteamericanas.
Hay que tener en cuenta que en España los canales televisivos tienen mucho peso y las productoras tienen mucho menos, es decir, son productos que las productoras hacen para las cadenas. Seguramente, si las productoras tuvieran canales de distribución para las series éstas serían más especiales, diferentes y más arriesgadas. Ahora las cadenas mandan, y además el minutaje va en nuestra contra. Mientras que una serie americana tiene mucho más presupuesto y menos minutos, nosotros tenemos mucho más minutaje (70 minutos por capítulo, lo cual es muchísimo) y además mucho menos presupuesto, por lo que estamos en clara desventaja. Pero creo que si que hay series de gran calidad y que hay muy buenos profesionales en nuestro país para llegar a hacer productos muy grandes. Y sobre todo creo que se ha conseguido una cosa muy importante, y és el crear una industria que crea trabajo y que genera competencia, forzando a producir series de calidad. No obstante, en el cine pasa lo contrario, y la crisis provoca que haya mucho menos trabajo, menos producción de películas. La televisión absorbe a los profesionales que no tienen la oportunidad de trabajar en el cine, por lo que regula la situación en cierta medida.
¿Sigues alguna serie?
La verdad es que ahora mismo no tengo mucho tiempo, aunque intento conseguirlas para poder verlas tranquilamente. Te puedo decir que Los Soprano, por ejemplo, me encantó. Me enganchó muchísimo.
Eres muy prolífico como actor, tanto en teatro como televisión y cine. ¿Tienes predilección por alguno de estos medios?
No, tengo la suerte de poder hacer las tres cosas. En los tres me divierto, me lo paso bien, y mientras pueda participar en proyectos que me parezcan interesantes, que un equipo igualmente ineresante, me es indiferente que sea televisión, teatro o cine.
Seguro que cuando vas por la calle la gente se te queda mirando y se acercan para pedirte un autógrafo o una foto ¿Cuál es la situación más absurda o divertida que te ha pasado al respecto?
En general la gente suele ser muy amable y muy cariñosa. Otra cosa es cuando ya pasan de las dos de la madrugada y estás por ahí de copas, porque la gente es más efusiva, jajajaja.
Soy de un pueblo de Murcia y suelo ir mucho. Cuando paro en alguna estación de servicio, y da la casualidad que hay algún autobús que para al mismo tiempo y bajan 50 o 60 personas y dicen “Ei mira, el de tal serie…” pues me resulta muy divertido, sobre todo si voy acompañado de gente.
¿Nunca te has planteado ponerte tras las cámaras?
Eso me parece muy complicado. Creo que sabría hacer alguna cosa, pero me considero sobre todo actor. Aunque no descarto lo de dirigir, quizá cuando sepa alguna cosa más.
¿Cuál es ese papel soñado que todavía no ha llegado?
Creo que la vida me está regalando cosas muy bonitas. No tengo ninguna predilección en plan “me gustaría hacer esto”, “me gustaría trabajar con tal director”… Creo que lo mejor está por llegar.
¿Próximos proyectos?
Terminar con Los hijos se han dormido. En Madrid estaremos hasta diciembre y estaremos de gira hasta mayo. También estoy cerrando una película nueva fuera.