Las críticas teatrales de Laura Zurita:
50 Sombras. El musical
50 Sombras. El Musical es una desenfrenada comedia que parodia la popular saga literaria de E.L. James. La trama sigue a Bev, Carol y Pam, tres amas de casa que, cansadas de la rutina, se apuntan a un club de lectura intermitente. La vida da un giro cuando se topan con «Cincuenta Sombras de Grey», la novela que despierta sus fantasías más profundas. A medida que se sumergen en las atrevidas pasiones de Anastasia Steele y Christian Grey, las tres mujeres se ven envueltas en transformaciones inesperadas en sus vidas privadas, desatando un deseo de escapar de la monotonía y explorar nuevas experiencias.
La esencia cómica de este espectáculo radica en la interpretación disparatada de los personajes, alejándose del imaginario colectivo del libro con referencias irónicas y un lenguaje propio de la comedia musical, logrando ser transgresora y excitante sin perder su inocencia, convirtiendo la trama erótica en un espectáculo hilarante y entretenido.
50 Sombras. El Musical se representa bajo la dirección de Matteo Gastaldo, y con Leo Rivera en el papel del carismático y excéntrico magnate Christian Grey. El resto del reparto es de Ana Herebia como Ana, Flor Lopardo como Pam, Paule Mallagarai como Bev, y Lucia Ambrosini como Carol, entre otros talentosos actores que dan vida a esta historia. La obra se estrenó en España el 15 de febrero de 2024 en el Teatro La Latina.
Desparpajo y desvergüenza
«Cincuenta sombras de Grey» fue un verdadero bombazo en su día. La novela erótica de la autora británica E. L. James del año 2011 describe la relación entre una recién graduada de la universidad, Anastasia Steele, y el joven magnate de negocios Christian Grey. Su éxito se debió en buena parte a sus escenas explícitamente eróticas, con elementos de las prácticas sexuales un tanto exóticas, como bondage/disciplina, dominación/sumisión, sadismo/masoquismo (BDSM).
El libro fue un éxito de ventas, y lo siguieron 5 más: «Cincuenta sombras más oscuras», «Cincuenta sombras liberadas», «Grey», «Más Oscuro» y «Liberado». Las novelas han vendido millones de ejemplares por todo el mundo, dando fe de la curiosidad de una buena parte de la población por el sexo poco convencional y las relaciones tóxicas.
Esa curiosidad lleva a Bev, Carol y Pam, tres amas de casa hastiadas de la monotonía, a poner sal y pimienta en su club de lectura intermitente. Su vida da un giro inesperado cuando se encuentran con «Cincuenta Sombras de Grey», la novela que despierta sus fantasías más ocultas. A medida que se sumergen en las atrevidas pasiones de Anastasia Steele y Christian Grey, estas mujeres se ven envueltas en transformaciones sorprendentes en sus vidas personales, despertando un anhelo por escapar de la rutina y explorar nuevas experiencias
50 Sombras. El Musical se burla con donaire y cariño de la novela original. La esencia cómica de este espectáculo radica en la interpretación exagerada de los personajes, alejándose del tono serio de la obra original con referencias irónicas y un estilo propio de la comedia musical. 50 Sombras. El Musical es atrevido y desvergonzado, combinando la trama erótica con una mirada socarrona a la mezcla de escándalo y fascinación que rodeó al libro.
Musical de calidad
La producción no solo ofrece una visión cómica de la relación entre Ana y Christian, sino que también explora el fenómeno cultural que rodea a la saga literaria, especialmente su influencia en el público femenino. La obra, a pesar de su enfoque humorístico, captura la esencia del libro y lo despoja de su pretensión literaria, revelando una relación sexual y tóxica entre una joven ingenua y un hombre rico muy pagado de sí mismo.
La calidad de los números musicales es fundamental para el disfrute del espectáculo. Los actores tiene buena técnica, una vocalización clara y fácilmente comprensible y una buena dosis de desparpajo. Ana Herebia, en particular, tiene una gran voz, y ataca su parte con brillantez y mucha energía.
50 Sombras. El musical es una obra divertida y vibrante, con pasajes realmente divertidos, y una puesta en escena ágil y llamativa. Es un buen plan para pasar una tarde relajada, distendida y alegre, y salir del teatro con la sonrisa puesta.