Netflix ha anunciado su nuevo proyecto, Ni una más, un drama adolescente basado en la novela de Miguel Sáez Carral, protagonizada por Nicole Wallace (Alma) y Clara Galle (Greta) y producida por DLO Producciones para la plataforma.
Con la premisa de Alma, la protagonista de Ni una más, “Cuidado. Ahí dentro se esconde un violador”, comienza este relato estremecedor que muestra el desamparo y la soledad que sufren las víctimas de agresiones sexuales. En palabras de su creador Miguel Sáez Carral:
Ni una más es un retrato de la generación Z y su relación con el mundo adulto, la pornografía, las redes sociales, las drogas y los abusos sexuales en los tiempos de la revolución feminista y el #MeToo”. Habla de encontrar tu camino en la vida, de aprender lo que significa la libertad, la amistad y el amor, de averiguar a dónde te pueden llevar tus deseos. Es una serie protagonizada por adolescentes, pero no es una serie “solo” para adolescentes.
Ni una más es un drama que se desarrolla como un thriller desde la primera secuencia. Tiene una tensión interna que recorre y sostiene el relato.
He pasado los últimos cinco años de mi vida muy enfadado con mi hija. Un día me di cuenta de que no podía seguir así. Esta historia nació de esa necesidad de transformar la dinámica de nuestra relación. Yo necesitaba recuperar a mi hija. Y me di cuenta de que para hacerlo el primer paso debía ser meterme bajo su piel. Así nació Alma.
En Ni una más, unos días antes de la semana de exámenes finales de segundo de bachillerato, Alma, una adolescente de 17 años, conflictiva, mala estudiante y con baja autoestima, extiende frente a la fachada de su instituto una tela blanca donde la noche anterior ha escrito en grandes letras de color rojo: “Cuidado. Ahí dentro se esconde un violador”. Alumnos y profesores se agolpan en las cristaleras de aulas y pasillos. Cientos de móviles graban la escena. Un murmullo se extiende de boca en boca. Nadie la cree. Todos piensan que está mintiendo. En el exterior del instituto Alma alza la barbilla en una actitud desafiante. Su mirada es retadora. Espera que nadie se dé cuenta de que está temblando.
¿Cómo y cuándo ha sucedido esa agresión sexual? ¿Quién es ese violador? ¿Quién es la víctima? ¿Es verdad lo que denuncia Alma o es mentira? Para averiguar las respuestas a estas preguntas hay que viajar cinco meses atrás en el tiempo. Ahí es donde comienza esta historia.