Adaptación cinematográfica de la novela editada en España como «Escoria»,
en la que el reconocido autor escocés nos deleitaba de nuevo con una
historia de excesos donde las drogas, el sexo y la violencia, marcan el
día a día de un detective de policía, interpretado por un soberbio James McAvoy, que quiere escalar a lo más alto por la vía rápida y sin ningún tipo de escrúpulo.
Claramente es la persona adecuada para el trabajo, el resto de sus
colegas son idiotas. Desafortunadamente, ha habido un asesinato y el
jefe de Bruce quiere resultados. No hay problema. Él está al mando y
cuando resuelva el caso y consiga el ascenso su mujer volverá con él. No
hay problema.
Podeis leer la crítica de uno de nuestros colaboradores que ha tenido ocasión de asistir a un pase de prensa aquí.
antiguo detective del Departamento de Policía de Nueva York, es un
alcohólico en fase de recuperación perseguido por los remordimientos y
con muchas cuestiones pendientes. Cuando una serie de secuestros que
tienen como objetivo a los principales narcotraficantes de la ciudad
desembocan en espeluznantes asesinatos, el líder de los narcos (Dan
Stevens) convence a Scudder para que encuentre a los culpables de la
muerte de su mujer. Trabajando como detective privado sin licencia, Matt
ve lo que la policía no puede ver, y transita por los lugares que más
temen. Operando al margen de la ley para localizar a los responsables de
tales atrocidades, Scudder camina entre las sombras por un filo que
puede convertirle a él mismo en un monstruo.
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