En septiembre, coincidiendo con la llegada a las tiendas de todo el mundo de la edición en Blu-Ray de
Scarface,
Universal Pictures desveló que estaba desarrollando otra versión de
Scarface, y los productores
Martin Bregma y
Marc Shmuger (que produjo la versión de
De Palma) estaban en pleno proceso de búsqueda de guionistas.
La película original fue estrenada por primera vez en 1932 bajo la dirección de Howard Hawks, basándose en la novela de 1929 de Armitage Trail. Luego regresó a los cines de la mano de Brian De Palma con Al Pacino al frente del reparto en 1983.
Podríamos pensar que estamos ante una nueva reinterpretación de la historia, o una secuela o precuela, pero no, es claramente un remake, y tendrá muy poco que ver con las dos primeras películas, excepto el título y la premisa general, que girará en torno a un inmigrante que se ve obligado a hacer todo lo posible en su búsqueda de una retorcida versión del sueño americano.
Ahora nos enteramos que David Ayer (Training Day) ha sido contratado para escribir la nueva película. Según el guionista: «Esto es una fantasía para mí, aún recuerdo cuando vi la película a los trece años y me dejó alucinado […] Lo veo como la historia del sueño americano, con un carácter moral cuya brújula apunta en una dirección diferente».
Ayer añadió: «Yo estudié tanto el original como la película de Ben Hecht-Howard Hawks y la versión de De Palma-Pacino y encontré algunos temas universales. Todavía estoy bajo el capó averiguando el cableado que va a interpretarse, pero las dos películas tuvieron una especificidad del lugar, había violencia sin complejos, y un personaje principal que socialmente asustaba a la mierda de la gente, pero que tenía su propio código moral. Cada uno fue fiel a los infiernos de su tiempo. Hay suficientes oportunidades en el mundo real de hoy que ofrecerá la oportunidad de hacerlo bien. Si fuera sólo un intento de rehacer la película de 1983, nunca funcionaría».
La idea de Universal es una película de Scarface para las nuevas generaciones, algo que no entendemos pues el clásico es claramente todo un «películón» para los jovenes que aún desconocen la película.
Parece ser que no estan muy preocupados por las reacciones, pues ya experimentaron lo mismo al rehacer el clásico de 1932, consiguiendo crear otro clásico, y como no hay dos sin tres, y la última película se ha convertido en parte de la cultura popular y muy lucrativa para el estudio, con más de 10 millones de unidades de DVD vendidas en todo el mundo, pues toca otra vez empezar de cero.
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