El Festival Internacional de Cine Fantástico Nocturna Madrid ha anunciado que homenajeará en su quinta edición, que se celebrará del 25 al 29 de octubre, a la actriz británica Caroline Munro, protagonista femenina del cine de terror y ciencia ficción de la Hammer Productions durante los años 70 y 80 e icónica chica Bond en La espía que me amó.
Munro recibirá el premio Nocturna de Honor, galardón que cada año reconoce la trayectoria profesional de una figura del cine de terror y fantástico, siendo la primera vez que se homenajea a una protagonista femenina de la historia del cine fantástico.
Además de recoger su galardón, Caroline Munro presentará el pase especial de Maniac, la mítica película dirigida por William Lustig en 1980 y protagonizada por Joe Spinell (Taxi driver, Rocky), con quien también coincidió en Star Crash, choque de galaxias.
Caroline Munro (Windsor, 1949) es una de las actrices más icónicas de los años 70 y 80 gracias a su participación en las producciones de terror de la inglesa Hammer Productions. La scream queen y heroína del género cuenta entre sus películas más destacadas El viaje fantástico de Simbad (Gordon Hessler, 1973), El abominable Doctor Phibes (Robert Fuest, 1971), Drácula 73 (Alan Gibson, 1972), Star Crash, choque de galaxias (Luigi Cozzi, 1978) y en España protagonizó El aullido del diablo (Paul Naschy, 1987) o Los depredadores de la noche (Jess Franco, 1987), entre otras.
Además de sus trabajos como actriz, Munro ha honrado el género en múltiples ocasiones participando en producciones para televisión, cortometrajes y documentales sobre la historia del cine fantástico como A place among the death (2016) o Scream Queens : Horror Heroines Exposed (2014). Actualmente prepara su nuevo largometraje de terror 315 Wicked Way.
Caroline Munro empezó su carrera gracias al concurso de modelos Face of the year, que la llevó a mudarse a Londres para trabajar en producciones publicitarias y cameos en distintas películas. En 1969, Paramount Pictures le da la oportunidad de debutar con su primer papel en Talento por amor, dirigida por Richard Quine y protagonizada por Richard Widmark, su padre en la ficción. Es este trabajo el que lleva a la productora inglesa de género más famosa de la historia, la Hammer Productions, a contar con ella en sus películas. Munro fue la única actriz en la historia de la Hammer en tener un contrato a largo plazo.
En 1977 su popularidad se hace aún mayor cuando rechaza el proyecto de Superman para convertirse en Chica Bond junto al recién fallecido Roger Moore en La espía que me amó. Pese a las ofertas de los estudios, Munro decide seguir fiel a su carrera en Europa y al género fantástico y de terror, regalándonos grandes papeles. Una de sus últimos largometrajes de terror, Vampyres (Víctor Matellano, 2015) fue estrenado en la tercera edición de Nocturna Madrid.
Fuente: Nocturna