Las críticas de David Pérez «Davicine»:
Sandman
Después de pasar años encarcelado, el Rey de los Sueños emprende un viaje por diferentes mundos para encontrar lo que le fue arrebatado y recuperar su poder. Neil Gaiman es el cocreador y productor ejecutivo de Sandman, adaptación de su cómic en la que Tom Sturridge es Sueño.
Dirigida por Jamie Childs, Andrés Baiz, Mairzee Almas, Mike Barker, Coralie Fargeat, Louise Hooper y Hisko Hulsing, completan el reparto Boyd Holbrook, Patton Oswalt, Vivienne Acheampong, Gwendoline Christie, Charles Dance, Jenna Coleman, David Thewlis, Stephen Fry, Kirby Howell-Baptiste, Mason Alexander Park, Donna Preston, Vanesu Samunyai, John Cameron Mitchell, Asim Chaudhry, Sanjeev Bhaskar, Joely Richardson, Niamh Walsh, Sandra James-Young y Razane Jammal. La serie se estrena Netflix el 5 de agosto de 2022.
Un mundo de fantasía muy personal
Neil Gaiman es tan adorado entre los amantes de los cómics como Alan Moore, a quien no solo se respeta por sus páginas sino de quien hemos visto múltiples adaptaciones en forma de películas como V de Vendetta, Desde el infierno o Watchmen. Gaiman nunca ha ocultado su pasión por la fantasía y el terror, pero el universo surgido de la cabeza de Gaiman no está poblado por elfos y orcos, que muchos veces es lo que nos viene a la cabeza cuando pensamos en novelas de fantasía, sino que en su obra nos encontramos personajes como Lucifer, Sueño o Muerte.
Mucho antes de ver películas que adaptaron su obra, como Coraline, o series inspiradas en sus páginas, como American Gods, este escritor británico nos sorprendió a todos con su obra original «The Sandman», que comenzó a publicarse en 1989 por DC Comics, y está formado por 75 volúmenes, considerándose una de las novelas gráficas más originales, sofisticadas y artísticamente ambiciosas escritas hasta el momento.
Los «mundos dentro de los mundos» de Gaiman tejieron una antología en episodios centrándose en el personaje alegórico de Sueño (la personificación antropomórfica de los sueños), el cual pertenece a la familia de los Eternos formada por siete hermanos (Destino, Muerte, Sueño, Destrucción, Deseo y Desespero [gemelos] y Delirio), y que consigue escapar de una prisión en la que ha estado encerrado durante décadas.
Sandman es un mosaico de mitos modernos y fantasía oscura en el que se entretejen con naturalidad la ficción actual, el drama histórico y las leyendas. La serie examina los lugares y personas afectados por el rey de los sueños, mientras este intenta reparar las faltas y errores que ha cometido en su inconcebiblemente larga existencia, tanto a nivel cósmico como humano.
Nada que objetar como fan de la novela gráfica
Durante décadas se han escuchado rumores sobre la posibilidad de ver en acción real las increíbles páginas de «The Sandman», y hasta la fecha nos habíamos tenido que conformar con audiolibros con reparto de voces increíble para poder disfrutar de otra forma de esta magnífica obra. Pero la espera ha valido la pena, y se puede ver en Netflix una fiel adaptación de lo que muchos denominan «un cómic para intelectuales».
Conseguir que cobren vida estas historias que giran alrededor de los dioses de la historia humana y que aparezcan mostrados con la misma naturalidad que las grandes figuras históricas o bíblicas es algo que ya tiene mérito, aunque para poder llegar a un público amplio, Netflix lo ha suavizado un poco para su adaptación para la pequeña pantalla, pero no ha sufrido recortes tan grandes como para poner el grito en el cielo, y no faltan numerosas referencias mitológicas y culturales en la serie.
Los rumores dicen que cada episodio cuesta alrededor de 15 millones de dólares, y cada dólar ha sido bien invertido, pues los reinos del sueño y el infierno son recreados de forma sorprendente, pero no sólo lucen de maravilla los escenarios «imaginarios», sino que cada detalle y cada decorado del «mundo real» está sorprendentemente recreado. Y si la puesta en escena es sobresaliente, no menos exquisitos son los efectos digitales, que nos dejan perplejos y sirven para hacer más cercana esta adaptación a lo que nos imaginábamos cuando leíamos la obra original, capturando la esencia de las novelas gráficas, que es la clave para cualquier adaptación, y reforzando esa sensación con la banda sonora de David Buckley.
Más allá del apartado visual, gracias al material de origen, Sandman plantea algunas exigencias que no son típicas de una serie de fantasía de Netflix, y disfrutamos de algunas reflexiones sorprendentes que surgen a partir de ciertos temas oscuros pero mostrados de forma impecable. Todo lo que vemos resulta familiar para los lectores de los cómics, ya que la serie se apega mucho al original y a las dos primeras historias de la serie: «Preludios y Nocturnos» y «La casa de muñecas», lo que no solo es de agradecer, sino que hace que se note la implicación del propio Neil Gaiman que defendió su trabajo como creador y productor de la serie, asegurándose una más que memorable adaptación que no sufra los cambios provocados en otros de sus trabajos, como American Gods.
Dado que «The Sandman» es propiedad de DC/Vertigo Comics, podríamos pensar que estarían en esta adaptación personajes conocidos de otras obras, pero no nos encontramos ninguna de las historias tangentes de DC Comics que formaban parte del material de origen, siendo importante tener claro que no aparecerá nada de eso para disfrutar aún más de la experiencia. Esta decisión es acertada pues, como el propio Gaiman ha dicho públicamente, la serie está pensada tanto para los fans como para aquellos que no tienen experiencia previa con este mundo antes de verla, y si tuviera interacciones con otros cómics o series que contaban con personajes de «The Sandman» obligaría a un esfuerzo aún mayor para entender todo lo que nos cuenta.
Tomándose ciertas libertades en el reparto
Sandman tiene como actor principal a Tom Sturridge, que consigue una interpretación fiel al Sueño que nos imaginábamos cuando leíamos las páginas de Gaiman (aunque algunas poses cuando hace morritos nos descuadren), logrando que este Eterno no sea ni heroico ni malvado, con una intensidad en sus ojos que dice más de lo que las palabras jamás podrían. Su apariencia está tan bien adaptada a la serie que no se han olvidado de trasladar de forma fiel y creíble el icónico cabello despeinado que luce en las páginas. El actor logra aportar un toque espeluznante a este personaje claramente inhumano a pesar de su aspecto físico, y gracias a un acertado uso de la cámara consiguen algunos planos «estiradas verticalmente» para que el aspecto que luce desnudo mientras está preso parezca poco humano.
Es importante dejar claro que a pesar de ser fiel, y tener a Gaiman implicado, los puristas de «The Sandman» pueden llevarse una decepción pues obviamente se ha recortado parte del material de origen, pero también hay numerosos cambios de género y origen étnico en los personajes principales, aunque funcionan bien. Uno de esos cambios deriva de la elección de Jenna Coleman, quien interpreta una versión femenina del conocido John Constantine, ahora Johanna Constantine, aunque aporta momentos magníficos a la serie, luciendo una versión elegante y más moderna de la característica gabardina de esta aventurera del ocultismo que se ocupa de los encargos espirituales pagados. Y Vivienne Acheampong, quien tenía la difícil misión de interpretar una versión alterada de género de la bibliotecaria del reino de los sueños pero logra salir airosa, robando como Lucienne (que no Lucien) algunas escenas incluso a Tom Sturridge con su tranquila presencia.
Completan el reparto, entre otros, Gwendoline Christie, quien da el salto de una gran serie como Juego de Tronos a otra serie para adultos, alejándose completamente del personaje con la que parecía que podría haberse encasillado, y consigue una interpretación impecable con toda la gracia, la belleza y la maldad del ángel caído Lucifer. Este detalle seguro no será del agrado de los fans de la obra de Gaiman y de Lucifer en concreto, pues aún algunos albergaban esperanza en ver a Tom Ellis retomando su papel de la serie de televisión basada en el personaje de DC Comics creado por Neil Gaiman, Sam Kieth y Mike Dringenberg y tomado de la serie de cómics «The Sandman», quien consiguió más tarde ser el protagonista de una serie de cómics derivada.
Hay que citar también a Boyd Holbrook interpretando a Corintio, una pesadilla que se escabulló del mundo de los sueños durante el cautiverio de Sueño y comenzó una carrera como un travieso asesino en serie en la Tierra. Por último, Asim Chaudhry como Abel y Sanjeev Bhaskar como Cain, basados en los hermanos bíblicos, también son encantadores, habiendo muchas otras bestias y criaturas fantásticas completando el elenco, pero es mejor disfrutarlas por sorpresa.
Sandman es visualmente espectacular y un deleite para los ojos, pero curiosamente no es lo más destacable de esta serie, pues es capaz de mantenerse fiel a las fortalezas de la obra original, transportándonos a un mundo familiar y a la vez completamente nuevo. Ojalá que tenga los espectadores que se merece para que Netflix siga dando luz verde a todas y cada una de las temporadas que quedan por llevar esta historia completa a nuestras retinas.
Listado de episodios de ‘Sandman‘
La serie Sandman está compuesta por 10 episodios de entre 38-54 minutos de duración cada uno.
Episodio 1. El sueño de los justos
Mientras busca a una pesadilla a la fuga en el mundo despierto, Morfeo cae en las garras del ocultista Roderick Burgess, que desea invocar y encadenar a la Muerte.
Episodio 2. Anfitriones imperfectos
Morfeo pone en marcha su misión para encontrar sus bártulos de poder (la arena, el rubí y el yelmo). Su aventura empieza con un famoso par de hermanos disfuncionales.
Episodio 3. … Sueña conmigo
Morfeo encuentra a la última persona que se sabía en posesión de su arena… y recibe una inesperada lección sobre humanidad. Ethel visita a su hijo.
Episodio 4. Una esperanza en el infierno
Una pista sobre el paradero de su yelmo hace que Morfeo solicite hablar con Lucifer. Una buena samaritana le echa una mano a un confundido John.
Episodio 5. 24 horas
Con Morfeo temporalmente fuera de juego, John se acomoda en un restaurante para observar a la gente… y poner a prueba su teoría sobre la verdad y las mentiras.
Episodio 6. El sonido de sus alas
Un Morfeo sin rumbo acompaña a su trabajadora hermana mayor, que le ofrece consejo y le anima a que vaya a ver a un viejo conocido.
Episodio 7. La casa de muñecas
Lucienne tiene una noticia inquietante para Morfeo. Rose Walker va en busca de su familia. Los admiradores del trabajo del Corintio se esfuerzan por llamar su atención.
Episodio 8. Jugar a papás y mamás
Mientras Morfeo estrecha el cerco sobre una de sus pesadillas perdidas, Rose intensifica sus esfuerzos para encontrar a su hermano y hace realidad el sueño de una amiga.
Episodio 9. Coleccionistas
Unas extrañas turbulencias sacuden el Sueño, Rose emprende un viaje por carretera con un nuevo amigo y el Corintio llega a una macabra convención con un invitado.
Episodio 10. Corazones perdidos
Mientras el vórtice del Sueño se vuelve más poderoso y los muros entre los reinos se debilitan, Rose lidia con un dilema imposible. Morfeo y el Corintio se ven las caras.
¿Qué te ha parecido la serie Sandman?
Sandman
Respetando la obra de Gainman? Pero si es todo lo contrario. La inclusión forzada con calzador ya cansa un poco. Y cada vez mas
Efectivamente, como comento en la crítica, han realizado ciertos cambios por el tema de la inclusión que descuadran a los puristas y fans de la obra, pero en general la sensación que da es completamente la que algunos imaginábamos que luciría en acción real. Esperemos funcione y en siguientes temporadas puedan mejorar el cgi y ser aún más sorprendente.
Para ser Netflix espero algo realmente malo, me sorprendió bastante, aunque la inclusión forzada es algo que me canso
No es que seamos puristas ni nada que ver, pero el obligarte a un inclusión forzada es algo que cansa, si aceptamos parejas del mismo sexo, personas que no definen un género, pero porque si son tan incluyen tes no incluyen tambien personas con capacidades diferentes, ahí sería todo equitativo. No es que moleste que cambien el origen étnico o preferencias de los personajes, sino que haya una falsa inclusión.