No es cine todo lo que reluce se ha desplazado hasta el 54 Festival de Sitges 2021. Cada día compartimos con todos vosotros cuáles son nuestras primeras impresiones sobre todas las películas que hemos tenido la oportunidad de ver durante estos diez días dedicados al terror y la ciencia-ficción en el lugar más emblemático para hacerlo y con el incomparable ambiente de entusiasmo por el género que se vive en la ciudad de Sitges. Hoy os hablamos de las películas: The Execution, Bloodthirsty, Titane y The Deep House.
THE EXECUTION
Dirigida por: Lado Kvataniya
Intérpretes: Niko Tavadze, Daniil Spivakovsky, Yulia Snigir
País: Rusia
Oficial Fantàstic Competición
Sinopsis: Durante años, las fuerzas policiales rusas han intentado detener al asesino en serie más inteligente y buscado del país. Pero incluso cuando lo atrapan, nadie puede demostrar su culpabilidad. A medida que se intensifica la persecución, la investigación se vuelve cada vez más personal entre el detective y el sospechoso.
Nuestra opinión: Este psycho-thriller ruso ha sido la primera película que he visto en esta 54ª Edición del Festival de Sitges 2021. La verdad es que The Execution no ha sido un buen comienzo. Pese a estar seleccionada por Àngel Sala como una de las «joyas» ocultas de este año, la verdad es que es un filme farragoso, mal ejecutado narrativamente y con una duración de 130 minutos a todas luces sobredimensionada.
El debutante Lado Kvataniya (que ha venido a presentarla) arriesga con una historia que transcurre en paralelo en distintos espacios temporales para completar el puzzle de la investigación de unos crímenes cometidos por un serial killer. Esa decisión convierte el visionado de la peli, por momentos, en algo confuso y errático cuándo la trama en realidad no es tan compleja y hasta podría recordar a míticos thrillers policiales de los años 90 como Seven o El silencio de los corderos. Violenta y seca, tiene el trasfondo de la evolución política del país, cayendo en algunas escenas en una exageración dramática que perjudica su credibilidad. Lo más destacado es la ambientación, su cuidada estética y la excelente fotografía de Denis Firstov.
BLOODTHIRSTY
Dirigida por: Amelia Moses
Intérpretes: Lauren Beatty, Greg Bryk, Katharine King So
País: Canadá
Noves Visions
Sinopsis: Grey, una cantautora indie vegana, se traslada a un estudio ubicado en un bosque para grabar su segundo disco en solitario. El proceso de grabación, dirigido por el productor de moda Vaughn Daniels, se complica cuando la joven cantante empieza a tener unas pesadillas vívidas donde se convierte en una bestia sedienta de sangre. ¿Se ha convertido Grey realmente en un monstruo, o se trata tan solo de un trastorno psicológico?
Nuestra opinión: Bloodthirsty no inventa la sopa de ajo, pero tampoco lo pretende. Se podría afirmar que parte de una idea similar a la de Crudo (hasta el póster es parecido) en cuanto a la transformación de una chica vegana en una carnívora insaciable durante una etapa de crecimiento personal en otras facetas de la vida. Una gran diferencia es que la película de Julia Ducournau conectaba con el espíritu del coming of age mientras que esta de Amelia Moses tiene un enfoque más adulto al tratar de una mujer con miedos e inseguridades relacionados con el fracaso o el compromiso, ofreciendo también un acercamiento a la creación artística como analogía de una vampirización que conlleva la peligrosa necesidad de despertar la bestia interior que todos llevamos dentro para conseguir los mejores resultados… No hay que olvidar que esa bestia interior y el mito del licántropo son el leit-motiv de este año para el Festival.
Bloodthirsty es la típica película que cualquier aficionado al género espera encontrarse y disfrutar en Sitges. Cine de género de toda la vida con mucha influencia de la Serie B y del terror puro de décadas pasadas. La puesta en escena es sencilla ya que sucede casi íntegramente en el interior de una casa mientras que su trama transita por algunos lugares comunes que le serán familiares al espectador. Aún así, la directora saca partido a las situaciones expuestas sin caer en lo autocomplaciente a través de una narrativa directa que equilibra a la perfección el drama psicológico con los mecanismos del cine de género. También resulta destacable el estupendo trabajo que hace la actriz Lauren Beatty para transmitir un gran abanico de emociones. Muy entretenida.
TITANE
Dirigida por: Julia Ducournau
Intérpretes: Agathe Rousselle, Vincent Lindon, Garance Marillier
País: Francia-Bélgica
Oficial Fantàstic Especiales
Sinopsis: Un padre que busca a su hijo desaparecido. Una niña con el cuerpo de carne y de metal.
Nuestra opinión: Titane es una de las películas más esperadas del año, especialmente para los fans del cine de género. Recientemente galardonada con la Palma de Oro, siento disentir con fuerza sobre la entusiasta recepción que está teniendo la película. Así lo manifesté en San Sebastián. Tal vez haya algo que no me conecta con el cine de Julia Ducournau. Ya en Crudo (2016) los elogios que recibió me parecieron excesivos, en especial, cuando se valoraba su originalidad o innovación temática siendo un filme que bebía mucho de películas que le marcaron el camino como Ginger Snaps (John Fawcett, 2001). En Titane sube la apuesta y revisiona lo mejor del gore y body horror francés para fundirlo como estaño ardiendo dentro del universo de la nueva carne de Croneneberg, J. G. Ballard o Shin’ya Tsukamoto. Esa parte es precisamente la que más me interesa.
Sin embargo, todo ese imaginario visual repleto de imágenes malsanas y enfermizas tiene también una función de reivindicación social sobre la identidad de género que me chirría más que las ruedas de un deportivo fardón derrapando en el asfalto. Encuentro que, por momentos, la sucesión constante de secuencias sangrientas, desagradables y provocadoras busca encontrar el impacto fácil y gratuito en la retina del espectador. Al contrario de lo que suele sucederme, cuánto más bestia se pone menos me atrae la propuesta. Aún así, estoy convencido que la película le flipará a mucha gente, especialmente a los buscadores de emociones fuertes. La película implica sumergirse en el lado más primitivo y depravado del ser humano, pero también plantea algunas ideas y reflexiones sociales de plena actualidad. Es una de esas pelis que necesitarían de un segundo visionado para poder abarcarlas desde todos los ángulos. También es de las que crean controversia y polarización. Lo que sí tengo claro es que no es apta para aprensivos ni embarazadas.
THE DEEP HOUSE
Dirigida por: Alexandre Bustillo y Julien Maury
Intérpretes: James Jagger, Camille Rowe, Eric Savin
País: Francia-Bélgica
Oficial Fantàstic Competición
Sinopsis: Tina y Ben son una pareja de youtubers especializados en vídeos de exploración submarina. Mientras se sumergen en un lago remoto, descubren una casa bajo el agua. El hallazgo pronto se convierte en una pesadilla, cuando comprenden que la casa fue el escenario de crímenes atroces. Atrapados, con sus reservas de oxígeno cayendo peligrosamente, se dan cuenta de que lo peor está por venir: no están solos en la casa.
Nuestra opinión: Mucha expectación había también para ver lo nuevo de los «enfants terribles» del terror francés Alexandre Bustillo y Julien Maury, directores que se dieron a conocer con el gore de Al interior y que el año pasado presentaron en el Festival la mediocre y decepcionante Kandisha. Su nueva propuesta, The Deep House (La casa de las profundidades), que nos llegará a plataformas a finales de este Octubre, es una original reinvención del subgénero de casas encantadas rodado con el estilo visual de una found footage. La idea es simple, pero sugestiva: Dos submarinistas se adentran en un viejo caserón sumergido en un lago para grabar imágenes para un canal de YouTube sobre lugares misteriosos. Quedarán atrapados al descubrir que el lugar está maldito mientras el oxígeno empieza a escasear en sus equipos de buceo.
La verdad es que la idea acaba estando por encima del resultado final. Hay buenos momentos en el arranque y alguna idea suficientemente creepy como para engancharnos a lo que sucede. Por desgracia, la película llega a un punto en el que perdemos el interés, en parte, por un exceso de la cámara en mano cansina que busca provocar tensión y acaba impidiendo que veamos la acción. Los directores disponen sobre el tablero de las piezas adecuadas para generar una mitología terrorífica alrededor de la casa y sus dueños, pero no acaban de profundizar en lo que podría hacer verdaderamente espeluznante la trama. Todo queda dicho si tenemos en cuenta que el mayor susto de la peli nos lo da un pez y no un fantasma. Aún así, teniendo en cuenta que era el último pase nocturno y que me he conseguido mantener despierto hasta el final, sin duda, debe significar que como entretenimiento pasajero funciona.
