Las críticas de David Pérez «Davicine»:
El arte de volver
Tras una gran acogida de crítica y público en su paso por el 17 Festival de Sevilla y el 77 Festival Internacional de Cine de Venecia, El arte de volver, dirigida y escrita por Pedro Collantes, se estrenó en cines el 11 de diciembre de 2020 de la mano de Filmax.
La película, protagonizada por una brillante Macarena García, es un relato intimista que habla de la extrañeza de regresar a casa después de vivir varios años en el extranjero. Nacho Sánchez, Ingrid García-Jonsson, Mireia Oriol, Luka Peros y Lucía Juárez completan el reparto principal del film, que también cuenta con la colaboración especial de Celso Bugallo.
En El arte de volver, Noemí es una joven actriz que vuelve a casa después de seis años en Nueva York para presentarse a un casting que podría cambiar su carrera. Durante las primeras veinticuatro horas de regreso en Madrid, Noemí tiene una serie de encuentros y despedidas que le enseñarán a apreciar las estaciones de la vida. Su abuelo, postrado en la cama de una residencia, la anima a perseverar en su empeño de triunfar en el mundo de la actuación mientras repasa los mejores años de su vida. En casa, su hermana pequeña la recibe con frialdad. El tiempo y la distancia han hecho mella. La complicidad que alguna vez tuvieron se ha convertido en una mezcla de sentimientos que ninguna de las dos sabe manejar. Con Carlos, un antiguo compañero, las cosas son diferentes. Ríen juntos mientras pasean por un pinar. Los dos se echaban de menos. También está Ana, una amiga artista cuya exposición Noemí visita entre el asombro y el espanto. Y finalmente Radu, un conductor de origen rumano con el que Noemí tiene más en común de lo que podría parecer. Estos encuentros, aunque breves, llevan a Noemí a replantearse su pasado, su futuro y su lugar en el mundo.
Un debut prometedor
Los cortometrajes de Pedro Collantes han sido seleccionados en festivales como Rotterdam, Chicago, Seminci o Montreal, y su trabajo más reciente, Ato San Nen, fue seleccionado para el César francés en 2019. Con esta filmografía era cuestión de tiempo que diera el salto al largometraje, y lo ha hecho por la puerta grande, pues El arte de volver es el primer proyecto español seleccionado en el Biennale College Cinema de Venecia, donde ha sido tutorizada por mentores como Michelle Turnure Saleo (Bestias del Sur Salvaje), Mike Ryan (The Turin Horse), Yorgos Tsourgiannis (Canino) o Meinolf Zurhost (Anticristo).
Conseguir entrar en este prestigioso programa no es sencillo, pues debe pasar una primera selección repleta de candidatos, para luego pasar una segunda ronda donde el guion deje claro que tiene futuro y, posteriormente, en menos de un año, esa idea debe coger forma y transformarse en película. Collantes tenía claro lo que quería, y ha conseguido una película intimista, con un claro perfil festivalero más que comercial, donde el gran trabajo de Macarena García no solo demuestra que su personaje protagonista requería de alguien capaz de cargar sobre si mismo el peso de todas las escenas, sino también un nombre que sirviera de reclamo para el público menos acostumbrado al cine de autor.
Un rostro con el que empatizar
Macarena García es capaz de ofrecer un amplio repertorio de sentimientos en esta historia sobre la vuelta a los orígenes y los reinicios, sobre lo que es no tener claro tu camino en la vida y lo difícil que es, a ciertas edades, mantener a tus seres queridos cerca. A lo largo de 6 mini historias, Macarena debe hace frente a sus antiguos fantasmas amorosos, a las amistades con las que ha perdido la confianza, a la familia que ya nota cierto distanciamiento, y a muchos personajes que ayudan a presentarnos los estados emocionales de la protagonista en su búsqueda por encontrarse a si misma, pero también uns historias que ayudan a empatizar con ella.
Puede que la película sea de ritmo pausado, a veces incluso algo lenta, pero esa sensación nos ayuda a conectar mejor tanto con la protagonista como con el gran elenco de secundarios que nos encontramos, entre los que podemos destacar a Ingrid García-Jonsson y Luka Peros, y mención especial merece el magnífico trabajo de Celso Bugallo. Cada uno de los encuentros demuestra que Collantes tenía claro el pulso con el que quería mantener la historia, entrando cada uno de ellos en el momento justo para completar el puzle emocional de la protagonista.
Atención al futuro del director
Viendo lo que ha sido capaz de conseguir con su primer trabajo, tendremos que prestar atención a la futura filmografía de Pedro Collantes, quien a buen seguro se convertirá en un asiduo de los festivales de cine de autor. Si en su primer trabajo ha logrado una cinta repleta de diálogos sutiles y emociones cotidianas, que bien pueden recordarnos a más de uno a ciertas obras de Éric Rohmer, con algo más de bagaje puede deleitarnos con alguna joya bajo el sello de «cine de autor.
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