Durante diez días se ha podido disfrutar de la octava edición de la Muestra de Cine de Lanzarote marcada por una programación arriesgada y comprometida de 24 películas repartidas en “Sección Oficial”, “Cruce de caminos: cineastas canarios”, y las dos nuevas secciones: “Trasfoco: el volcán” y “Destiladera”, y se clausuró el pasado sábado con la proyección del clásico de 1950 Stromboli, de Roberto Rossellini.
En total, cerca de 1.700 asistentes han disfrutado tanto de las proyecciones como de las actividades paralelas de la Muestra, que incluyeron visitas a los lugares más emblemáticos de la isla. En la inauguración del pasado 22 de noviembre en la Cueva de los Verdes más de 300 personas disfrutaron de Dentro del volcán, la película de Werner Herzog que explora la importancia y la cultura generada en torno a los volcanes en varias partes del mundo.
Javier Fuentes, director del certamen, declaró durante la clausura:
Este año la Muestra ha crecido. Por la isla de Lanzarote han pasado más de 35 directores y directoras con los que hemos aprendido y mantenido rigurosos debates, y la asistencia a las proyecciones ha aumentado un 30%. Hemos puesto en marcha apuestas arriesgadas y diferentes que se corresponden con la filosofía de la Muestra, como la deliberación pública del Jurado.
Una de las novedades importantes de esta octava edición, es que la deliberación del Jurado de la Muestra se hizo de manera pública, siendo una iniciativa innovadora dentro de los festivales y muestras de cine a nivel internacional. El público pudo escuchar los argumentos y planteamientos que llevaron al Jurado a emitir su fallo, una forma de deliberar que se adecuaba al planteamiento que desde la octava edición de la Muestra se han querido incentivar: el cine como una experiencia colectiva y reflexiva.
En relación al Palmarés de la Muestra, tras casi una hora de deliberación y análisis bajo la atenta mirada del público, el Premio a Mejor Película recayó por unanimidad en La imagen que te faltaba, de Donal Foreman. La película recopila las imágenes grabadas por Arthur MacCaig, un joven norteamericano de ascendencia irlandesa que acabó siendo el documentalista del IRA en los años 70. Foreman recopila este material, que retrata alguno de los conflictos más violentos de la última mitad del siglo XX, y crea una película íntima y reflexiva sobre la añoranza de un padre, el papel de la familia, el deseo y el compromiso político.
Además del Premio a Mejor Película, los miembros del Jurado otorgaron una Mención Especial a la película de animación en stop-motion La casa lobo de Joaquín Cociña y Cristóbal León.
El Jurado Joven otorgó a Continúa grabando, de Ghiath Ayoub y Mohammad Ali Atassi, el Premio a Mejor Película, y a M de Yolande Zauberman, la Mención Especial.
Por último, el Premio Numax también recayó en Continúa grabando, premio que facilitará el estreno de la película siria en salas gallegas.