El resultado es el siguiente: Mentiras y Gordas, una «obra» de «cultura», consigue 995.000 euros. Los abrazos rotos, un millón de euros, redondos. Dieta Mediterránea: 800.793’49 euros. Mejor que nunca, unos 450.000 euros. Todo ello para un montón total de subvenciones de 3.670.173’80 euros. Una minucia, sin duda, y más en estos tiempos en los que nos sobra el dinero.
Y que, además, no es una subvención, sino una recompensa. Porque se otorga a aquellos que han recaudado más, no por ser productor novel, u ofrecer una nueva visión del cine o… No, se otorga a las películas más taquilleras, que, estamos todos de acuerdo, no son siempre las mejores. Si examinamos cuidadosamente quienes se llevan el 66% de esos más de 3 millones de euros son:
- El deseo D.A. S.L., por Los Abrazos Rotos. La productora es de los hermanos Almodovar.
- Agrupación de cine 001, por Mentiras y Gordas. Es una empresa «ad hoc», creada ex-profeso para la película, y que solo ha producido DOS títulos, tal y como podéis ver en imdb.
Es decir, artistas, sin duda que tienen problema para llegar a fin de mes, y a los que las descargas están matando. Pero no se crean que en No Es Cine Todo Lo Que Reluce fomentamos la piratería. ¡¡ No señor !!. Os prohibimos que bajéis esas joyas de la cultura española. Reconozco que no he visto Los Abrazos Rotos, pero si he tenido la desgracia de contemplar ese engendro que es Mentiras y Gordas. Ni se os ocurra descargarla. Al precio que está hoy la banda ancha, la más cara de Europa, es un desperdicio de dinero. Es más, llamar cine a esa película, y, además, subvencionarla, es una afrenta a todos aquellos que intentan hacer películas de verdad, y que no pueden despegar, porque si solo te van a dar dinero si recaudas… mal lo llevamos para promocionar el cine. Luego la gente emigra a otros países y se preguntan porqué.
Dar subvenciones a las más taquilleras es un poco extraño en esto del cine, cuando ya han quedado amortizadas de sobra.
Con otro tipo de ayudas generas otro problema, las películas que hago por que quiero y me importa un pepino lo que diga la gente.
Primar a las películas más comerciales es algo que incita a producir películas para que le gusten al publico.
De todas formas, siempre hay alguien que encuentra la trampa en las subvenciones, Mentiras y gordas tubo suerte de tener una gran campaña de marketing.