Las críticas de David P. «Davicine»: Le Concile lunatique
Arnaud Demuynck y Christophe Gautry dirigen este corto francobelga de animación en el que nos presentan una historia pintoresca, donde un joven abre la ventana de su habitación en el ático de una casa y, en ese instante descubre un paisaje lunar que lo envuelve y amenaza con encerrarlo en una eterna capa de hielo. Al darse cuenta, cierra la ventana para ahuyentar la visión y, en ese momento y desde el fondo de su alma, escucha el sonido de una canción cuya letra es un poema.
Con un toque que nos recuerda bastante al mundo imaginario de Tim Burton, no sólo por la animación de objetos con stop motion, sino también por la estética cuidada y siniestra de sus personajes, este corto se complementa con amimación por ordenador, tanto 2D como 3D, para crear en su totalidad una ambientación extraña, lúgubre y compleja, que sirve para ubicar el drama musical que nos presenta, con toques de comedia.
Dado que la historia está narrada a través de la música, repleta de canciones y poesía, quizás verlo con la necesidad de los subtítulos haga que perdamos ciertos detalles de la animación, aunque todo ello encaja perfectamente dentro del mundo de fantasía creado por sus directores como homenaje al poeta Jules Laforgue.
Si la poesía de Laforgue la vieramos en imágenes, seguramente adquiriría la forma de este corto, pero viendo el corto desde la perspectiva de película que debe contar una historia, si puede ser con principio y final, falla, pues es demasiado complejo a la hora de interpretarlo, ya que, como sabemos, la poesía no siempre es fácil de interpretar.
Buen diseño de personajes, interesante animación y ambientación, poesía repleta de sentimiento, pero no llega a engancharnos como para que deseemos saber más de la historia que cuenta, de cómo han llegado ahí sus personajes y a donde iran después. Un mero homenaje a un gran poeta, que visto como si de un videoclip se tratara nos hace desconectar un rato del mundanal ruido.