jueves, marzo 28, 2024

Sangre y cenizas (V). ‘Sangre eterna’

En esta ocasión viajo a Chile para continuar mi caza de vampiros. Hasta allí fui atraído por un título del cineasta Jorge Olguín, Sangre Eterna, en la que nos cuenta la historia de una chica (de nuevo con el recurrente nombre de Carmila como en tantas producciones sobre vampiros); la joven comenzará a frecuentar un grupo de compañeros de su facultad de periodismo, de estética gótica y aficionados a la fiesta, las drogas y a los juegos de rol de temática vampirica.

Los jóvenes se plantean en un momento dado incluir un nuevo jugador en la trama de su partida para conseguir salvar uno de los personajes (el de Elizabeth), y Carmila comienza entonces a acompañarlos asiduamente, lo que le permitirá entablar una amistad con ellos y una relación sentimental y sexual con el líder del grupo, M. Éste ha presenciado una violenta escena en una de esas salidas nocturnas y en ella ha creído presenciar cómo unos auténticos vampiros (los personajes de Dahmer y Chupacabras) desangraban a un hombre.

M guardará este secreto, supongo que por miedo a ser tachado de loco, pero cuando Elizabeth comience a frecuentar la compañía de esos vampiros (con los que se relaciona debido a fiestas y al consumo de droga), se verá en la obligación de proteger a sus amigos y tratar de alejarlos de estos dos personajes (sin mucho éxito y con la complicación de que no explicará a nadie su obstinación por enemistarse con Dahmer y compañía). M tratará de manejar sus propias dudas al darse cuenta de que todo parece muy real y de que el peligro es cierto pero que, quizá, todo sea fruto de su imaginación debido al abuso de estupefacientes. De esta manera contamos con que en la primera mitad de la película Carmila sustenta el protagonismo y pasará el testigo a M cuando éste trata de manejar la situación para salvar las almas de sus compañeros.

La trama nos muestra algunas escenas de cómo los jóvenes imaginan a sus personajes en el juego de rol, en las que podremos ver un ridículo enfrentamiento entre sus alter ego en la ficción y las fuerzas de la iglesia. No obstante, aunque la puesta en escena de las peleas sea un tanto ortopédica y algunos efectos especiales ridículos, en ocasiones podemos ver caracterizaciones muy interesantes que podrían haber dado mucho de sí.

De hecho, creo que la elección de los actores en cuanto su apariencia es bastante buena, su caracterización muy correcta como también lo es la estética general de la película y la elección de los escenarios, creando una atmósfera sugerente, y una producción bien ambientada gracias también a la banda sonora pero apoyando una trama que carece de ritmo, que es demasiado lenta, que se hace aburrida, inconexa y sin rumbo y que no consigue aprovechar los frentes abiertos que el mismo Olguín ha imaginado.

El arranque es muy sugerente y críptico, dándonos a entender que el eclipse lunar es el catalizador de una serie de eventos especiales o sobrenaturales que es difícil precisar, pero que nos atraen y despiertan nuestra imaginación, creando expectativas que Sangre Eterna no satisface. No obstante, este arranque llama de una forma potente la atención y continúa dando paso a una conferencia de uno de los profesores cuyas enseñanzas tendrán una importancia clave en el desarrollo de los acontecimientos. De una forma brillante, Olguín introduce los títulos de crédito de tal manera que se fusionan con las imágenes proyectadas por el profesor en sus diapositivas y gracias al tema musical crea más misterio y el ambiente necesario, pero éste acaba por diluirse sin llegar a nada serio.

Desde luego, la perspectiva religiosa que incluye en torno a la purificación de las almas podría estar mucho más aprovechado, porque al final no nos consigue transmitir nada acerca del origen de estos vampiros, ni consigue crear una película intrigante más allá de los veinte o treinta primeros minutos, de tal manera que un mensaje subyacente ronda sobre nuestras cabezas sin que el director acabe de hacernos partícipes de él.

Sangre Eterna tenía todos los elementos para conseguir convencernos, porque las ubicaciones de la trama son estupendas y tiene los personajes adecuados, y quizá cuidando un poco más los efectos especiales podría haber conseguido una puesta en escena fantástica, pero ni tiene buenos diálogos ni consigue centrar la atención en la clave de la historia (si la veis os daréis cuenta de que está tan ofuscado en sorprendernos al final con lo que realmente está ocurriendo que nos oculta totalmente cualquier elemento de juicio y nos priva de mucha de la información que necesitamos). Si quería mantener nuestra atención alejada de algo para que no descubriéramos el pastel demasiado pronto, quizá debería haberse centrado más en la investigación de M sobre la religión, las almas y los vampiros, o haber incluido más escenas de acción que nos entretuvieran.

Tras ello hay un trasfondo bastante interesante en cuanto a cómo un vampiro es capaz de generar un escenario en el que los humanos no son más que meros peones que maneja a su antojo, gracias a su superior inteligencia y a su poder de sugestión. Potencialmente la idea era muy buena, y escondía una faceta mística y ritual que podría haber sido un éxito si hubiera sabido manejarla.

El vampiro según… Sangre Eterna (Spoiler).

*Origen. Un ritual en torno al eclipse lunar unido a una muerte violenta condena el alma de un ser humano a la inmortalidad vampírica. Son entidades malvadas que esconden un rostro monstruoso.
*Motivación. Saciar la sed de sangre, satisfacer sus necesidades primarias y generar nueva prole. Aunque se definen más por su decadencia que por su ansia de sangre.
*Poder. Es confuso distinguir cuáles son los poderes de los vampiros reales y cuáles los de los vampiros del juego. En la realidad, parece ser que sobre todo se basa en su poder de crear ilusiones, en la sugestión y la manipulación de la mente. En el juego tienen características físicas sobrehumanas y poder sobre las sombras.
*Entorno. En la película frecuentan edificios abandonados y bares de estética gótica donde captar víctimas drogadas y desorientadas.
*Influencia. Son capaces de llevar a una persona a la locura haciéndoles ver cosas que quizá no existan. Suelen crear grupos donde un vampiro asume el liderazgo.
*Debilidades. Una exposición prolongada a la luz solar les quema. Son susceptibles al poder divino, de tal manera que el agua bendita les daña.

1 COMENTARIO

Deja un comentario (si estás conforme con nuestra Política de Privacidad)

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Síguenos

9,670FansMe gusta
2,070SeguidoresSeguir
500SeguidoresSeguir
23,108SeguidoresSeguir
5,210SuscriptoresSuscribirte
- Publicidad-

ÚLTIMAS PUBLICACIONES

Crítica de ’Las cosas sencillas’: La extraña pareja en la montaña francesa

Las críticas de José F. Pérez Pertejo: Las cosas sencillas Pueden verse dos películas diferentes en Las cosas sencillas, el último largometraje de Eric Besnard, director,...